Cinco millones de euros para comprar un Mundial

Un directivo de la FIFA compró a responsables de fútbol africanos, según revelan unos documentos publicados por 'The Sunday Times'.

El exdirectivo de la FIFA Mohamed ben Hammam efectuó pagos por unos 5 millones de dólares a responsables de fútbol africanos para comprar el Mundial de 2022 para Qatar, según revelan documentos difundidos por 'The Sunday Times'. De acuerdo con el periódico, que en las próximas semanas detallará su investigación, existen miles de facturas, faxes y correos electrónicos que demuestran intercambios entre Ben Hammam y directivos africanos que, aunque no tenían voto, podían influir en el resultado del concurso.


El que fuera presidente de la Comisión Asiática de Fútbol entre 2002 y 2011, posteriormente apartado del fútbol entre acusaciones de corrupción, orquestó "una campaña encubierta" de sobornos y agasajos para recabar apoyo a la candidatura de su país, explica el periódico. Ben Hammam, de origen catarí, desembolsó esos cerca de cinco millones de dólares con el objetivo de crear un clamor a favor de la candidatura de Catar e influir a elementos clave del comité de 24 miembros.


The Sunday Times señala que los archivos, obtenidos tras analizar una base de datos electrónica, prueban la existencia de diez fondos controlados por Kemco, la empresa de construcción del millonario catarí, desde los que se hicieron multitud de pagos, así como transacciones en metálico por hasta 200.000 dólares a cuentas de los presidentes de 30 asociaciones de fútbol africanas.


El exdirectivo de la Fifa también organizó banquetes y recepciones para agasajar a esos directivos, en los que repartió hasta 400.000 dólares en metálico, y a su vez estos se comprometen en correos electrónicos a hacer campaña para defender la causa de Catar. Según el rotativo, Ben Hammam pagó además más de 1,6 millones de dólares meses antes del voto clave a cuentas bancarias controladas por el exdirectivo de la Fifa Jack Warner, que era miembro del comité por Trinidad y Tobago.


También abonó facturas legales y de detectives al miembro del comité de la FIFA por Oceanía, Reynald Temarii, para que luchara contra su suspensión tras ser acusado de corrupción. Ello evitó que Temarii fuera reemplazado a tiempo por otro candidato que hubiera votado a favor de Australia en el concurso por el Mundial de 2022, explica el periódico.


Entre otros, se documentan pagos de 800.000 dólares a la Federación de Costa de Marfil, cuyo miembro del comité Jacques Anouma se compromete a "impulsar con fuerza la candidatura de Catar", señala The Sunday Times. Las revelaciones sobre este complejo entramado se conocen la víspera de que el investigador de la Fifa Michael García se reúna en Omán con el comité organizador de Doha a fin de abordar sospechas de corrupción en los concursos para el Mundial 2022 y 2018.


El periódico señala que la FIFA, que celebrará su congreso anual el 10 de junio en vísperas del Mundial de Brasil, estará ahora bajo presión para volver a celebrar una votación sobre los Mundiales de 2022 y 2018.