TENIS

Félix Mantilla cuelga la raqueta un año después de superar un cáncer de piel

Fue número 10 del mundo y superó a Federer en la final de Roma 2003.

Un año después de regresar a las pistas tras superar un cáncer de piel, Félix Mantilla ha decidido colgar la raqueta. El anuncio del jugador llega justo cuando el equipo español se dispone a competir con el de Alemania en cuartos de final del Grupo Mundial de la Copa Davis. Mantilla tuvo en su momento la oportunidad de defender los colores de España. Lo hizo en el año 1999, frente a Dinamarca. El conjunto hispano se impuso por 5-0 y Mantilla colaboró con una laboriosa victoria sobre el danés Mark Nielsen después de cinco competidos sets: 6-2, 3-6, 4-6, 7-6 (2) y 6-3.


Nacido en Barcelona el 23 de septiembre de 1974, Félix Mantilla Botella fue el prototipo de jugador extremadamente luchador. En modo alguno le asustaba de antemano tener que medirse al peor rival. A este respecto, cabe recordar, por ejemplo, su llamativo triunfo en la final del Open de Roma del año 2003. En aquel partido derrotó nada menos que al suizo Federer en tres sets consecutivos.


Profesional desde el año 1993, su carrera fue desarrollándose de forma progresiva hasta alcanzar el décimo puesto de la clasificación mundial el 8 de junio de 1998. Un año antes dio todo un aldabonazo con la conquista de nada menos que 47 triunfos en pistas de arcilla.


Entre sus éxitos más significativos aparece el conseguido sobre un cáncer de piel, detectado por los médicos en el año 2005. La aparición de un lunar en la espalda se transformó en un melanoma, cáncer de la piel. Fue un rudo golpe para el tenista barcelonés. Gracias a su tesón, sin embargo, logró derrotar a la adversidad.


Mantilla se inició con la raqueta a los diez años. Tuvo la oportunidad de defender a su país en la Copa Sunshine para júniors, formando pareja con su amigo Albert Costa. Su último partido oficial lo jugó hace menos de un año, el 23 de julio del 2007. Viajó a Umag y perdió en la primera vuelta del torneo ante el holandés Robin Haase. Su palmarés registra diez títulos, el primero de los cuales lo alcanzó en Oporto, el año 1996.


El sólido juego de Félix Mantilla se caracterizaba por golpes desde el fondo. En tierra batida se movía como una anguila. Llegó a ser semifinalista en Roland Garros (1999). En aquella edición perdió frente a Carlos Moyá por 6-1, 2-6, 6-2 y 6-4.