Blog La voz de mi amo

por Matías Uribe

NICO BERTOLO

"Me faltan socios"

Impulsado por tres goles en los últimos tres partidos, el argentino es el futbolista del Zaragoza más en forma. Aquí reflexiona sobre su estado y su fútbol.

Nico Bertolo.
"Me faltan socios"
HERALDO

Su comienzo de temporada fue vibrante, pero el declive del equipo le arrastró del once. Ahora, ha encadenado tres jornadas marcando. ¿Cuánto lo necesitaba?

Bastante. Empecé bien, salí de los planes y ahora se me está dando el gol. Eso me refuerza la confianza, también la titularidad de Getafe.


¿Le animan más lo goles o recuperar un lugar en la alineación?

Jugar de titular. Contar con la confianza de un entrenador es mucho más importante que los goles. Yo no vivo del gol, no soy delantero, para ellos, el gol es la confianza. Pero si vienen, bienvenidos sean.


Como hombre de la segunda línea ha cogido la responsabilidad anotadora en un equipo con los delanteros peleados con el remate. Nunca marcó muchos goles, pero sí unos pocos goles?

Sí, en Banfield los tuve, pero no soy un goleador. Me considero un volante con la obligación de llegar al área y tratar de conseguir anotar. Por suerte se está dando y ojalá siga la racha.


Su rendimiento tocó techo en el Apertura 2008 con Banfield. ¿Se está aproximando a ese nivel?

Sí, pero aún me faltan muchas cosas que aprender. Tengo 24 años y aún me queda por crecer. Yo así lo quiero, trato todos los días de aprender y ayudar al equipo al mismo tiempo.


Entonces, ¿Zaragoza aún no ha descubierto al mejor Bertolo?

No puedo decirlo. Ojalá pueda dar más. Las cosas a veces salen y a veces no. Yo siempre garantizo ganas y confianza en los partidos, y espero que contra el Villarreal pueda repetir.


¿Tenía bronca contenida?

Esa es la palabra. Venía diciéndoselo a mi señora durante los últimos días. Esa bronca se ha quedado reflejada en los festejos de los goles. El día del Mallorca me quité la camiseta con rabia, era bronca contenida por estar fuera del once, por bajar mi rendimiento, por la situación del equipo? Eso se me había acumulado en forma de bronca y me desahogué quitándome la camiseta y peleándome con un aficionado en el partido contra el Sevilla.


¿Le dio muchas vueltas a ese incidente una vez en frío?

Sí. Me arrepiento de mi reacción. Me sentí mal después de hacerlo. Existen unas reglas y los futbolistas estamos para respetarlas. Pido disculpas por aquello.


¿Le ha llamado la atención la exigencia de la afición del Real Zaragoza?

No crea. En todos los clubes, cuando las cosas van mal, pasan cosas de estas, en unos peores y en otros un poco menos. La gente me ha apoyado en todo momento, ocurre que no me gustó lo que ese hincha nos dijo, porque no solo se dirigió a mí.


Bertolo no es un futbolista tranquilo...

No, no lo soy. Me pongo nervioso, tengo carácter y temperamento, pero trato de no lastimar a nadie y siempre actúo con buena fe. En la celebración del gol al Sevilla, estaba revolucionado al cien por cien y en esa situación uno no se da cuenta de las cosas que hace. Debo aprender también de eso.


¿Qué le solicita Aguirre que no le pedía Gay?

Más o menos, lo mismo. Los dos me pusieron en la misma posición. Quizá Aurelio me pedía que jugara más por banda con la pelota y Aguirre prefiere que me cierre un poco más, para que pase el lateral. Al entrenador le gusta que se incorporen los laterales.


¿Le favorece la nueva propuesta de Aguirre? Da la impresión de que le beneficia el juego de diagonales al jugar a pie cambiado?

Sí. Aurelio también me lo pedía. Es cierto que en Getafe toqué muchas pelotas, eso me favorece porque mis características no pasan por no tocarla y jugar solo tácticamente. Yo siempre salgo a por el balón.


Es cierto que usted se esconde poco, en los últimos partidos ha sido el único con capacidad de desborde...

Ese es mi juego. A veces me equivoco por cansancio o por falta de experiencia. Yo siempre pido la pelota y trato de buscar la mejor elección, aunque a veces no sea la correcta.


¿Le faltan socios arriba?

Sí, es verdad. Casi siempre intento ganar el fondo, pero en la última elección, o no la hago bien yo, o mis compañeros no saben si ir al primer palo o al segundo, o la tiro al segundo y se van al primero? Creo que se debe también al momento del equipo. Con trabajo y entrenamiento, seguro que mis compañeros, cuando desborde, sabrán que la pondré en el primero e irán al primero.


¿Qué debe corregir en su juego?

La defensa. Tengo muchos defectos y entreno para mejorar ese trabajo defensivo. Quiero arreglar eso. Con trabajo, lo conseguiré.


¿Cómo?

Hablando con los compañeros, con las indicaciones de los técnicos? Mis características son esas y ojalá pueda cambiarlas. Pero que no recupere quince pelotas no quiere decir que no defienda. La gente en eso se equivoca. Hago mucho recorrido en la cancha. Debo aprender a hacerlo bien, con experiencia lo lograré.


¿Qué es lo que más le está costando del fútbol español?

La adaptación no, porque es como estar en Argentina, por el idioma. En Italia, sufrí más por la táctica y la lengua. Acá, el juego es parecido al argentino, aunque con menos libertad y dinámica. Eso me cuesta más, pero lo peor es la situación del equipo. Es complicado destacarse en un momento así. Nos cuesta a todos.


¿En qué han notado la mano de Aguirre?

Es pronto para analizar esta pregunta. Cuando las cosas van mal, se buscan soluciones por todos los lados y si no se encuentran, hay que cambiar. Espero que la variación sea para mejor y nos ayude a salir del mal momento.


¿Qué piensa de las críticas sobre la calidad de buena parte de la plantilla?

Mis compañeros son los mejores. Hay quien dice que no son jugadores de Primera, pero yo confío a muerte en ellos. Cada uno, va a sacar lo mejor que tiene para ayudar al Zaragoza a superar esta situación.


¿Esta es la peor experiencia con un equipo de toda su carrera?

Sin duda. Nunca me tocó vivir una situación así, pero de todo se aprende. Vamos a salir. No se me pasa por la cabeza que el Zaragoza se vaya a Segunda. Saldremos adelante, por el significado del club, por la gente y por nosotros.


Se le ha vinculado a los planes del nuevo seleccionador argentino, Sergio Batista. ¿Feliz?

Sí, con que se diga mi nombre me basta. Aunque fuera a un entrenamiento, iría con toda la ilusión del mundo. Soy un afortunado, porque es un nuevo ciclo y se me asoció como opción. Pero yo no dejo de pensar en el Zaragoza.