POLIDEPORTIVO

Fallece Eduardo Lastrada, presidente del Stadium Casablanca

Ha dirigido el club durante los últimos ocho años y fue delegado de la sección de natación.

Eduardo Lastrada Piedrafita, presidente del Stadium Casablanca, falleció ayer a los 59 años a causa de una larga enfermedad. Anteriormente, Lastrada había sido delegado de la sección de natación -desde 1996 hasta 1999-, para luego formar parte del patronato como tesorero. En el año 2000, fue nombrado presidente del club con más socios de Zaragoza, alrededor de 20.000; y dos años después, se hizo también con la presidencia de la Asociación de Clubes Deportivos de Zaragoza. Desde que Lastrada fuera nombrado presidente del Casablanca, el club ha vivido una importante transformación. Un pabellón polideportivo con piscina cubierta, nuevas pistas de pádel, una nueva barbacoa o un proyecto -actualmente en construcción- de un moderno restaurante son algunas de las reformas que han visto las instalaciones en los últimos años.


Sus restos mortales fueron trasladados ayer al velatorio número 7 del tanatorio de Torrero. Esta tarde, a las 17.30, se celebrará su funeral en la iglesia de San Pedro de Zuera, su localidad natal, y será posteriormente incinerado.


El Stadium Casablanca vio ayer cómo se apagaba una de las personas que con más tesón y convencimiento ha luchado por este club. Eduardo Lastrada se despedía del Stadium de sus amores. Sin embargo, su sello quedará para siempre impreso en el enorme legado que ha dejado para los socios de este club social.


Hace 25 años, en enero de 1983, Eduardo Lastrada enseñaba por primera vez su carné de socio en la entrada de un Stadium Casablanca muy diferente al que puede disfrutarse hoy en día. En aquel momento comenzó un idilio intenso y, sobre todo, muy productivo. Su gran pasión era la natación. Para el recuerdo quedan las largas tardes al borde de la piscina viendo nadar a su hijo. De esta pasión nació su primer compromiso con el Casablanca. En 1996 se convirtió en delegado de la sección de natación, un cargo que ostentó durante tres años. Los que compartieron con él aquellos tiempos destacan su dedicación y, sobre todo, el que era su gran sueño: llegar algún día a tener una piscina cubierta.


"Era empecinado. Cuando se le metía una cosa en la cabeza tenía que llevarla a cabo. Era una persona muy querida", comenta emocionado Jose Luis Sánchez, delegado de natación anterior a Lastrada. Y es que había mucho trabajo por hacer pero también muchos amigos a su lado. Eduardo dedicaba la práctica totalidad de su tiempo libre a su compromiso con el club. "Se le podía ver rondando por aquí por lo menos tres horas al día", señala Sánchez.


Su trabajo como ejecutivo en Ibercaja nunca fue un impedimento. Lo compaginaba a la perfección con este otro "trabajo" sin remuneración alguna que le llenaba de satisfacción.


Muchos amigos en el camino

Félix Alonso, actual Delegado de Deportes del Stadium Casablanca, es otra de las personas que compartió con Lastrada trabajo e ilusiones. "Cuando Eduardo era delegado de la sección de natación, yo lo era de la de montaña. Estábamos siempre codo con codo y era un compañero extraordinario", recuerda Alonso. Juntos participaron en los eventos del 50 aniversario del club, de los que Lastrada fue el gran promotor. Por ejemplo, un partido de waterpolo entre la selección española y la holandesa que el Casablanca recuerda como uno de los grandes acontecimientos de la historia del club. "Allí estuvo él, organizándolo todo. Sin duda, ha sido clave en la tremenda evolución del Stadium", añade Alonso.


Una evolución que se ha visto marcada por la construcción de la piscina y el polideportivo cubiertos. Era el gran sueño de Eduardo Lastrada; tener una pileta en la que los jóvenes talentos del Stadium pudieran entrenarse sin tener que acudir a otros recintos ajenos. Ese sueño es ahora una realidad que comparten miles de socios. Es el fruto de su tenacidad.


Después de ver realizada esta obra tan querida, Lastrada no se detuvo. Puso sobre la mesa más sueños, más ilusiones. "Nos empujó a todos a no parar", asegura José Antonio Cejador, Gerente del Stadium Casablanca. "Ha sido él el que nos ha impulsado a llevar a cabo las obras que se están llevando a cabo en el nuevo restaurante", añade.


Desde que, hace año y medio, le sobrevino la enfermedad que se lo ha llevado, sus paseos por los rincones del Stadium Casablanca se fueron espaciando. "Nos llamaba cada día para interesarse por las obras del restaurante. Lo tenía siempre presente", comenta Cejador. "Es una pena que no haya podido ver este proyecto terminado porque sabemos que hoy en día era su gran ilusión", añade Félix Alonso.


Sin embargo, el restaurante no tardará en convertirse en una realidad, como lo son el polideportivo, la piscina cubierta o las pistas de pádel. Y aunque Eduardo Lastrada no vuelva a caminar entre los pinos del Stadium Casablaca, nadie olvidará ya su legado.