REAL ZARAGOZA

El Vasco, tranquilo sin caras nuevas

El entrenador blanquillo sigue con una tremenda sangre fría el lento proceder del Real Zaragoza en el mercado invernal y no clama por los refuerzos.

"No contaba con refuerzos a estas alturas. No tengo ningún problema si no llegan, ni me hago ilusiones. Trabajo con lo que tengo y ya está", reiteró un día más Javier Aguirre cuando se le recordó que, el de hoy en Barcelona, es ya el segundo partido de enero en el que, si el club hubiese fichado los refuerzos que se antojan necesarios para salir del pozo del descenso, ya habría podido cambiar la cara del equipo con caras nuevas.

Javier Aguirre ha tenido siempre un cuidado extremo a la hora de pedir fichajes públicamente. De hecho, no lo ha hecho en ningún momento aunque esté trascendiendo su mediación para intentar captar futbolistas como Paulo da Silva, Maza Rodríguez, Giovani dos Santos o Carlos Vela, todos con raíces o vínculos en México. El Vasco, ante la incertidumbre que genera la falta de liquidez del Real Zaragoza cuando tiene que negociar nuevas incorporaciones en el mercado internacional, quiere guardarse las espaldas hasta que no llegue el 31 de este mes de enero y se cierre la puerta a las compraventas. Aguirre no desea menoscabar ni un milímetro la moral de sus actuales pupilos, el único valor seguro con el que cuenta mientras Agapito no le demuestre lo contrario con nuevas contrataciones. "Estoy contento con la actual plantilla y estoy trabajando bien con ellos. Yo creo que el Real Zaragoza puede salvarse del descenso con esta plantilla, por su puesto que lo creo", declaró con tono solemne (no es la primera vez que lo hace así desde su llegada). Dudar del grado de sinceridad de su aseveración entra por completo en el plano de la subjetividad de cada receptor de dicho mensaje.

Aguirre repicó una vez más en el sentido de su discurso: "Agapito sabe que pienso así desde el primer día que me senté con él para firmar el contrato con el Real Zaragoza. Él me decía: 'algo traeremos, pero no hay dinero'. Yo le respondía que, con este equipo que tenemos y recuperándose Ikechucku Uche en febrero, yo me quedo tranquilo", abundó el técnico mexicano.

Eso sí, en un momento de la explicación, el Vasco jugó a los acertijos con su habitual aire somarda. "Todo esto es así. Otra cosa es que en los despachos se esté trabajando o no para lograr traer refuerzos. Eso, investínguelo ustedes", retó a los periodistas presentes en la sala de prensa de La Romareda.