El "Valencia Street Circuit" tuvo, como era de esperar, sus pequeños puntos negativos, pero la organización pudo salvarlos a tiempo. El ánimo de Valmor Sport ha sido siempre el de intentar agradar al mayor número de personas y de que Bernie Ecclestone y todo el mundo de la F1 se fuera con un buen sabor de boca de esta ciudad mediterránea, y lo ha conseguido.

Los espectadores que tuvieron problemas con su posición fueron finalmente reubicados en otras tribunas. Le quedan todavía seis años de contrato, con posibilidad de prorrogarse por otros cinco, y visto lo acontecido en su primera edición, seguro que la capital del Turia repite por mucho tiempo como capital del 'gran circo'.

Además, con la incorporación este año del circuito urbano de Singapur en el calendario, parece que los trazados urbanos empiezan a imponerse en la F1. Y por supuesto no hay que olvidarse de Montecarlo, un lugar que siempre ha estado ahí, en el calendario, y que continuará por siempre.

Parecía imposible el viernes, cuando apenas se congregaron 28.000 espectadores en las gradas para presenciar los primeros entrenamientos, que el circuito se llenara, pero al final lo consiguieron. La organización del Gran Premio de Europa anunció que las entradas se habían agotado, con la presencia de 115.123 espectadores el domingo.