FÚTBOL SALA

El Sala 10 toma forma

Los tres nuevos fichajes refuerzan la estructura del conjunto que prepara Santi Herrero

Poco a poco, el Sala 10 avanza en la construcción de la plantilla con la que afrontará el curso en la División de Plata, bloque con el que intentará regresar cuanto antes a la elite del sala español, esa categoría de División de Honor que no supo defender en la pasada temporada.


El conjunto inició su preparación hace poco más de dos semanas con los jugadores que permanecen en el club tras el descenso y un par de refuerzos aragoneses: Juanjo Silva, Abel Budría, Marcos Latorre; Raúl Izquierdo, Kel, Luchi y Dani Latorre. Santi Herrero


Inmediatamente después de concluir las negociaciones a la baja con los jugadores renovados (se argumentan limitaciones económicas), el club ha iniciado la campaña de fichajes foráneos. La pasada semana llegaron el brasileño Rodrigo Taverna y el gaditano Sergio Rivero, futbolistas con capacidad para competir a gran nivel en Plata. Sergio ha completado muy buenas temporadas en Polaris Cartagena y Valencia. Carlos Sánchez ya lo quiso firmar años atrás, aunque su propuesta no fue aprobada por la comisión técnica del club. Sánchez también apostaba por Carlos Corvo, la última incorporación hasta el momento del Sala 10, pero nuevamente el sanedrín del entonces DKV Seguros desestimó su propuesta.


Indicador positivo


Con lo que queda de la pasada campaña y las incorporaciones, el Sala 10 adquiere una línea competitiva. El resultado en el segundo partido de la pretemporada así lo indica: 3-1 ante un rival directo, como el Bilbo.


La plantilla la ha diseñado Santi Herrero, que debutará en el banquillo del Sala 10 desde el inicio de la temporada. Santi ya participó en la dirección del equipo en dos fases. En 2001-02 ayudó a Chavi Ladaga en las últimas jornadas. El año pasado también asumió la dirección del equipo en el periodo de sanción de Ricardo Menezes.


La diferencia esencial respecto a las anteriores etapas radica en que la actual plantilla la ha elaborado el propio Santi Herrero en función de su criterio y de las limitaciones del club. Él también se juega mucho: su prestigio, su futuro. Y también el futuro inmediato del sala de elite aragonés. Huir de los errores del pasado resultará imprescindible para edificarlo.