CAI BM ARAGÓN

El CAI escapa vivo

El conjunto aragonés pierde por tres goles en la pista del Chambery en el partido de ida.

En el infierno sobre hielo, las brasas vestían la camiseta negra del Chambery, el durísimo equipo francés que ayer derrotó al CAI Aragón en la ida de los cuartos de final de la Copa EHF. Derrota, pero no muerte. Cayó, pero el conjunto aragonés logró escapar vivo del Palacio de Hielo de Albertville. El cielo queda para el encuentro de vuelta en Zaragoza.


Se receleba del temerario sistema defensivo francés, un arriesgado planteamiento con uno, dos e incluso tres avanzados. Los técnicos españoles de prestigio (Cadenas y Pastor) lo rechazan. De entre los clubes grandes, solo el Ciudad Real apuesta por sacar hombres a la línea de puntos.


Prendes ayudó muchísimo a no tartamudear en la lectura de la defensa gala. El pivote se ofreció a la primera línea, en la que Stankovic y Sorrentino daban soluciones desde la periferia. El aporte goleador de Prendes y las picardías de Toño Cartón y Amadeo Sorli sostuvieron a un CAI Aragón que fue exigido por un Chambery Savoie rapidísimo en las transiciones.


El altísimo ritmo gestó un encuentro eléctrico. Ningún equipo lograba fugarse de más de un gol. El internacional francés Daniel Narcisse se erigió en el gran protagonista. Se mostró con un central excepcional tanto en la creación como en la finalización. Kosovac decidió que Amadeo Sorli fuera su sombra. Lo malo es que cuando Kos apostó por la defensa mixta, Narcisse ya había firmado siete goles.


Con Amadeo encima como una lapa, Narcisse no anotó más en el primer tiempo. A pesar de recibir las primeras exclusiones y disputar en inferioridad numérica todo el tramo final del primer acto, el CAI Aragón logró alcanzar el descenso con una diferencia favorable de dos goles (18-20) lograda por Robert Arrhenius en el último segundo de la primera mitad.


Un parcial 4-0 generado otra vez por la magia de Narcisse volteó el resultado (22-20). Carlos Prendes detuvo la hemorragia, pero el conjunto aragonés no se logró rehabilitar por completo. Con 23-22 en el minuto 39, el técnico Phillippe Gardent extrajo del banquillo al renqueante Jackson Richardson y lo unió a Narcisse y Benjamin Gille. Los galos estiraron su ventaja empujados por la fuerza descomunal de Gille y el talento de Narcisse, que al final se fue hasta la docena de goles.


Kosovac pidió tiempo en el minuto 41 (25-22). Zaky tomó la brújula como central, pero el portero Stojinovic apareció para decidir. Los franceses incluso alcanzaron los cuatro goles de renta (29-25). Al final, 33-30. Se perdió el partido, pero no la eliminatoria. Queda Zaragoza. El CAI logró escapar vivo de Albertville.