CAI BM ARAGÓN

El CAI Aragón se pierde

El equipo naranja se deja los puntos y la quinta plaza en Granollers.

Desorientado, con la mente puesta en la Copa EHF, solo activo a ratitos, el CAI Aragón se perdió y perdió en Granollers. Los puntos se los llevó el que los trabajó. La quinta plaza de la Liga Asobal se acerca a Valladolid. Siempre nos quedará la Copa EHF.


Algo no olía bien antes del partido. No olía o no sabía. Sabía, no de sabor, sino de saber. No parece serio que un encuentro oficial de Liga Asobal entre el BM Granollers y el CAI Aragón lo piten dos árbitros catalanes. No lo parece y no lo es. El caso es que los árbitros inicialmente señalados, los canarios Raluy y Sabroso, fueron sustituidos por Pastor Gamón y García Fernández, unos auténticos amigos para los vallesanos.


Los árbitros catalanes ayudaron al equipo catalán, dieron el empujoncito al Granollers cuando lo necesitó; pero el CAI Aragón perdió por bastantes más motivos. Resulta complicado alcanzar un objetivo cuando la mente está centrada en otro objetivo. El equipo naranja vive, piensa, sueña, con la Copa EHF. Nordhorn aparece en todas las conversaciones, en todas las vicencias, en todos los deseos. El partido ante los alemanes está fijado para el sábado. Ayer había señalado otro de la Liga Asobal en Granollers. El equipo aragonés llegó tarde, lo jugó a ratos. Así, por supuesto, resulta muy complicado ganar.


Colaboración arbitral al margen, el BM Granollers acumuló más méritos para atrapar la victoria. No está desarrollando una buena temporada el conjunto vallesano, con cambio de entrenador incluido; pero ayer evidenciaron contar con un bloque bien armado. En la cuna del balonmano español siguen creciendo talentos notables. Ayer, la zurda mágica de Raúl Campos, autor de 15 goles, abrió el camino. También ayudaron muchísimo Álvaro Ferrer, un primera línea muy interesante, y Vicente Álamo, el portero que acaba de firmar el Ademar León.


En el arranque, además del martillo de Campos, Carlos Viver abrió la defensa aragonesa desde el extremo. Svitilica se sumó la fiesta ante un CAI Aragón que bailaba con el paso cambiado. Hasta tres veces cambió de central Kosovac: de Doder a Zaky, pasando por Víctor Álvarez. Krivokapic, que regresaba a la que fue su casa, fue lo más potable de un primer tiempo para olvidar.


La segunda mitad transportó a Zaky al extremo, donde el egipcio se expresó con clase y eficacia. Aunque no supo rentabilizar las superioridades numéricas que disfrutó, el conjunto aragonés fue limando diferencias. Después de 55 minutos discretísimos, el CAI Aragón llegó al momento procesal del partido con opciones. Con 27-25, a falta de dos minutos, Ortega erró un pase de contragolpe a Doder, que se encontraba solo. Recuperaron los catalanes, que sentenciaron en la siguiente posesión.


Ortega, Doder y sus compañeros podrán resarcirse el sábado. Eso sí, los puntos de ayer no regresarán. Perdidos están. Como la versión del CAI Aragón de ayer.