De demonio a salvador

Ewerthon podrá cumplir su deseo de ser útil al Zaragoza tras frustrarse su salida del club

Ewerthon juguetea con un balón en la Ciudad Deportiva.
De demonio a salvador
e. muñoz

Del "no vas a vestir más la camiseta del Zaragoza" se ha pasado en pocas horas al "contamos contigo". Tras la gravísima lesión de rodilla de Uche, Ewerthon aparece como principal flotador salvavidas de la depauperada línea delantera del equipo en estos inicios de temporada. El goleador brasileño ha sufrido en silencio 20 días de presiones internas dentro del club donde se le ha instado de todas las formas posibles a que abandonase el Zaragoza para favorecer el ingreso de dinero líquido que permitiese obrar otros refuerzos. Su negativa final a día 31 de agosto, basada en desacuerdos postreros de índole económica que le perjudicaban personalmente, provocó un flujo de declaraciones desde la entidad que han llegado a poner en duda la profesionalidad de Ewerthon.

 

Ahora, cuando aún le restan por cumplir dos partidos de la sanción de cinco que arrastra del año pasado, el paulista ha cambiado su rol dentro del vestuario a causa del caprichoso destino. De estar prácticamente defenestrado, se convierte en una pieza clave para sustanciar el ataque blanquillo a partir del duelo ante el Getafe. "Se han dicho e insinuado muchas cosas sobre mí estos días que no son ciertas y la vida deja siempre a cada uno en su sitio. Yo, en todo momento, he estado implicado con el Zaragoza y lo estaré mientras siga aquí. Firmé un contrato por 5 años con este equipo y siempre manifesté mi deseo de cumplirlo, pese a que desde el club me dijeran en su día que no tenían intención de renovarme. Estoy muy a gusto en esta ciudad y mi intención no ha variado nunca", manifestó ayer Ewerthon.

 

"El año pasado fui el único que, con todas las consecuencias, optó por quedarse aquí para jugar en Segunda y lo demostré marcando 28 goles. Este año, de nuevo en Primera, mi idea siempre ha sido la de seguir igual, jugando, disfrutando y marcando muchos goles para el Zaragoza.

 

Para ello trabajo cada día mientras se acaba mi sanción", prosiguió el brasileño. "Lamento mucho lo de Uche. Como mi compromiso con este club sigue inalterado pese a lo sucedido, espero jugar enseguida, ser útil y marcar muchos goles", concluyó.