En catalán, barrufet significa pitufo. Papá Pitufo se jubila hoy en Zaragoza.

En cuanto a la Liga Asobal, es cierto que mi último partido será en Zaragoza. Pero en esta temporada, la de mi adiós, todavía tenemos retos muy importantes, como los de la 'Final Four' de Colonia, que es algo fundamental para nosotros.

No se le aprecia nervioso en el momento del adiós.

Es el final de una etapa de mi vida, la de jugador. Ha sido muy bonito, pero todo tiene un principio y un final. Yo voy a dar la cara hasta el último día.

¿Esperaba haber llegado tan alto cuando comenzó de chaval, cuando se puso por primera vez entre los tres palos?

Nunca lo pensé. Todo fue muy rápido. Comencé en la Safa de Horta. Tuve la suerte de que me fichó el Barça, un gran club.

Y en el Barça ha marcado un hito histórico: 20 años de permanencia en la elite.

Ya le digo que me siento muy afortunado por haber caído en un club como el Barça, por haber triunfado, por haber ganado tantos títulos, por llegar a la selección española, por todo.

El Barcelona, como todo gran club, genera filias y fobias. Su caso, sin embargo, es singular. ¿Por qué Barrufet ha permanecido inmune a las fobias? ¿Por qué todo el mundo le ha manifestado cariño?

Es cierto que siempre me he sentido respetado y, en cierto modo, querido.

Usted reúne más singularidades. Por ejemplo, siempre juega de amarillo.

Leí un estudio que decía que los lanzadores tenían una fijación con el amarillo, que siempre disparaban a él, o sea, al cuerpo. Además, el único día que no jugué de amarillo, me rompí los ligamentos cruzados. Fue en Gáldar, en 1993.

Era un jovenzuelo. Después, lo ganó todo. Tengo que mirar los apuntes, pues temo equivocarme: siete Copas de Europa, dos Recopas, 11 Ligas Asobal, 10 Copas del Rey. De las internacionalidades, he perdido la cuenta.

280 veces.

O sea, el español que más veces ha defendido la camiseta nacional.

Así es. También he tenido suerte con España. Ganamos un Mundial, dos medallas olímpicas... Estoy muy satisfecho.

¿Qué sera del equipo nacional sin Barrufet?

La selección española sigue teniendo jugadores de primera fila mundial. Hay talento, un proyecto nuevo de equipo. Hay que confiar en ellos, hay que tener fe en el futuro.

¿A quién deja como heredero?

Quedan muy buenos porteros. En España, Hombrados y Sterbik son de lo mejorcito. en el mundo, Saric, Omeyer...

¿Y como chavales con futuro?

En el Barça están Gonzalo y Rodrigo, que apuntan buenas maneras.

Nos referiremos al encuentro del adiós a la Asobal, que será hoy en Zaragoza.

En Zaragoza he jugado con el equipo nacional, pero no demasiadas veces con el Barça porque Zaragoza durante muchos años no estuvo en la Asobal y, cuando estuvo, fue de forma esporádica. Ahora ya llevan cinco temporadas seguidas. Eso habla de un equipo consolidado.

Ese club consolidado es el CAI Aragón.

Esta temporada empezaron muy bien. Han bajado algo en los últimos encuentros. Lo han hecho bien. Mejor dicho, llevan tiempo haciéndolo bien.