PRIMERA DIVISIÓN

Cristiano, sin freno

El Hércules no pudo resistir a la ambición del portugués, que marcó dos goles. Benzema sustituyó a Pepe en la segunda parte y participó en el empate de su equipo.

Cristiano Ronaldo continúa con su racha y ayer culminó con dos goles la remontada de su equipo en el estadio Rico Pérez.
Cristiano, sin freno
JAIME REINA/AFP

Con Cristiano sin freno, el Madrid sigue lanzado. Gracias al 'crack' portugués, el Real Madrid firmó ayer su primera remontada de la temporada y dio otro golpe de autoridad. Se encontraron Mourinho y los suyos en un escenario inesperado, porque nunca se habían visto por debajo en el marcador, y aunque sufrió y tardó demasiado el líder en cerrar el partido, no se le escaparon los tres puntos.


El Hércules se adelantó a los tres minutos, pero no pudo resistir a la calidad y ambición del portugués, que marcó los dos últimos goles, con la ayuda de Benzema, y también participó en el empate. Aunque no aparezca Özil, como ocurrió en el Rico Pérez, y el Madrid continúe sin brillar con su fútbol, siempre puede y debe confiar en Cristiano, un seguro de vida en un equipo que ha aprendido a sacrificarse y que no para de crecer con su 'Pichichi'.


El Madrid hizo méritos para ganar tras el descanso y hasta resucitó Benzema, quien dio origen al 2-1 que acabó de forma definitiva con el Hércules. Mourinho le dio otro empujón hacia la recuperación y el francés lo aprovechó en la recta final y recuperó la sonrisa. Con este Madrid parece fácil recuperarse, y mucho más si nadie encuentra el antídoto para el imparable Cristiano.


El tempranero gol de Trezeguet hizo mella en el Madrid, que en el primer tiempo sufrió más que en cualquier otro partido, pero después sacó el orgullo y algo de su fútbol y puso las cosas en su sitio. El Hércules provocó pánico en el tramo inicial y los blancos tardaron en reaccionar. No lo hicieron hasta el final del primer tiempo, cuando apostaron sin éxito por el individualismo de Cristiano y Marcelo, que con Özil anulado decidió lanzarse arriba a resolver. Hasta entonces, el Hércules le dio un repaso al Madrid, excesivamente lento y embarullado entre la maraña que tejió Esteban Vigo.


En la segunda parte, los blancos salieron con las ideas más claras, bastante mejor juego y, ante todo, efectividad. No tardó en imponerse la lógica y en llegar un empate que hacía presagiar que culminaría la remontada madridista. Para no variar, el gol del Madrid llegó gracias a Cristiano, cuyo lanzamiento no consiguió blocar Calatayud y aprovechó Di María.


A partir de entonces fue más fácil para los madridistas, que se sienten bastante más cómodos si no tienen que llevar la iniciativa. Su mayor potencial está en el juego directo, en sus trepidantes ataques en los que casi siempre participa Cristiano. Sin embargo, quien fue atrevido ayer fue Mourinho. El técnico retiró a Pepe para dar entrada a Benzema y retrasar a la defensa a Khedira. Sin embargo, el Madrid no se volcó sobre la portería contraria. No lo necesitó, porque entre Marcelo, Benzema y Cristiano acabaron con la resistencia del Hércules.