El CAI no tiene dudas de que entrará en la ACB. De hecho ni siquiera contempla la posibilidad de no hacerlo, tal y como reconocía ayer el gerente de la entidad Pedro Enériz. El responsable económico del club quiso explicar la situación de las cuentas del club y negó que no se haya pasado la auditoría de la ACB sino que se trata de un informe provisional (de unos auditores que trabajan para la Asociación de Clubes de Baloncesto) en el que se detalla el déficit patrimonial rojillo, pero que no da valor a la plaza que tiene en propiedad el CAI. Enériz insiste en que todo tiene solución y que el problema parte de un "criterio contable". Para unificar criterios, los auditores han elevado una consulta al Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC), cuya respuesta, de la que dependerá el futuro inmediato de la entidad aragonesa, aún no ha llegado.Por aclarar unas cuentas que a los profanos en la materia nos pueden resultar farragosas, el club asume que tiene ese déficit patrimonial siempre y cuando no se le dé valor a su plaza en la ACB. Esa plaza fue adquirida por 2,8 millones de euros hace dos años y el CAI entiende que actualmente tiene que tener ese valor reducido en los dos años de amortización que han transcurrido, es decir, unos 1,68 millones de euros.

Los responsables rojillos exponen que de dar valor a la plaza ese déficit no existiría y no habría problema alguno. De hecho, incluso actualmente no consideran que exista ninguna dificultad para acceder a la Asociación, puesto que insisten en que este informe provisional en ningún momento se trata de la auditoría de la ACB y que desde el estamento baloncestístico no les han comunicado "nada oficialmente". Eso sí, no deberían olvidar que es un análisis realizado por unos auditores contratados por la propia ACB y que la Asociación hará caso de lo que expongan esos auditores.

Enériz comentó que la situación actual es "de ocupación y no de preocupación, porque es una cuestión de un criterio contable y el que utilizamos nosotros es el del sentido común".

El gerente de la entidad zaragozana explicó que el valor cero que se dio en su día a la plaza ACB fue con motivo del descenso, a expensas de lo que les aconsejaron unos auditores externos, pero en ese momento ya se hablaba de que en el caso de retornar a la elite se daría a la plaza el valor que tuviera en ese instante. Como esa plaza se amortiza en cinco años, al total habría que restarle una quinta parte por cada año transcurrido. En el caso del CAI, como han pasado dos, según Enériz el valor tendría que ser de tres quintos de los 2,8 millones que costó, es decir, en torno a 1,68 millones.

Pedro Enériz añadió que desde que el 14 de este mes presentaran la documentación en la ACB e hicieran los primeros pagos obligatorios "la ACB no nos ha pedido ninguna documentación más".

De esta manera, el club ahora está a expensas de lo que diga el ICAC, dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda, acerca del criterio a aplicar. La respuesta estaba prevista para la pasada semana pero no ha llegado todavía. En el caso de dar la razón al club las cuentas rojillas cuadrarían. Pero en caso de que avalara el criterio de los auditores el CAI se encontraría con un serio problema. "Todo tiene solución y si fuera así habría formas de subsanarlo, como, por ejemplo, con aportación de capital al club", es decir, la ya muchas veces nombrada ampliación de capital.

Enériz, además de mostrar su optimismo y tranquilidad en este asunto, reveló que el déficit con el que el CAI ha cerrado la temporada 2009-2010 "será menor al aprobado por el Consejo de Administración".