COPA EHP

Comienza la aventura

El CAI Aragón inicia hoy su caminar por la Copa EHF, la competición en la que ha escrito las más brillantes páginas de su corta historia. Recibe al Bregenz austriaco.

Imagen para la historia: Mariano Ortega vuela sobre Karol Bielecki en el Bordelandhalle de Magdeburgo en la final de 2007.
Comienza la aventura
OLIVER DUCH

En esencia, la vida se sintetiza en media docena de imágenes, de momentos, de ratitos maravillosos con los que sazonar este estado absolutamente eventual llamado vida. Mamá atándome las zapatillas de niño, la chica de las pecas que me guiñaba el ojo en clase, el día que transformé mi devoción en profesión, el nombre que escribí en el lomo del álamo que se ve desde mi ventana... En esta síntesis heterogénea de nombres, fechas y quereres, no puedo excluir el día que abrí un ordenador portátil ante 8.000 enfervorecidos germanos. Era la final de la Copa EHF en Magdeburgo, el día que el CAI Aragón pudo ser campeón y que dos miserables rusos apellidados Charnega y Poladenko lo impidieron. Creo que este pensamiento individual acerca del balonmano y del CAI Aragón coincide con el sentir mayoritario de toda persona que quiera y sienta el balonmano aragonés y al primer equipo aragonés. He aquí la elevada trascendencia de la competición que hoy arranca (18.30, pabellón Príncipe Felipe), la cuarta participación del CAI Aragón en la Copa EHF.

 

Para los jugadores, para los directivos y ex directivos, para los más fervientes seguidores de antes (Máquina Naranja) y de ahora (Artilleria Naranja), para todos, la EHF reúne un significado especial. El CAI Aragón siempre se ha mostrado totalmente identificado con esta copa. Es en ella en la que ha fabricado sus mayores gestas. Nombres como Dunaferr, Skjern, Chambery o Kozina forman parte de su patrimonio sentimental. Además de esta ineludible carga emotiva, el torneo aglutina un enorme atractivo para el club naranja. La Liga Asobal, por muy bien que lo haga (que lo está haciendo), solo está al alcance del Barça y del Ciudad Real. En la Copa del Rey los opciones podrían ser mayores, pero las opciones siguen siendo escasas. Es en la EHF, con la criba de los grandes equipos europeos que selecciona la Champions, donde la posibilidad resulta verdadera.

 

La Copa EHF también ha dibujado la trayectoria del club. En la final de 2007 en Magdeburgo, el CAI Aragón tocó techo. Con otro arbitraje, probablemente el club aragonés exhibiría en sus vitrinas el título. Al año siguiente, en la semifinal de Nordhorn, el equipo emitió una luminosa señal de alarma que no fue atendida. Se demandaba un cambio, una regeneración. En la semifinal del año pasado (¡siempre se ha llegado al menos hasta la semifinal!), el club tocó fondo, en el oprobio de Gummersbach. Allí, paradójicamente, nació la certeza del viraje radical que ha experimentado el club: el ascenso de Mariano Ortega a primer entrenador, la incorporación de figuras en ciernes (Larsson y Grebenar), la necesidad de robustecer la portería (Malumbres). La EHF, en suma, ha marcado nuestro caminar. La aventura que hoy nace, por encima de la sobresalinete regularidad evidenciada en la Asobal, o del pelotazo que se espera dar en la Copa del Rey, definirá el actual curso.

 

El invitado austriaco

Estamos acabando la previa y todavía no hemos hablado del rival. Evidentemente, parece y es secundario. Esto no quiere decir que no deba ser valorado. El Bregenz cuenta con un dilatado (que no brillante) historial en Europa. Tratándose todavía de una tercera ronda, no se puede afirmar que el CAI Aragón haya tenido precisamente suerte en el sorteo. Ahora bien, lo esencial, lo básico, lo primero, es el CAI: su indiscutible potencial; su brillantísimo pasado, su presente y su futuro que se aglutinan en esta embriagadora competición; el peso cada vez más considerable de este club en el lamentable panorama del deporte de elite en Aragón. Todo esto deben tenerlo en cuenta los jugadores cuando hoy salten a la arena. Y los aficionados que van a estar a su lado.

 

Hay armas para afrontar cualquier batalla en la EHF. Una muy buena portería, con el apagafuegos de siempre (Pablo) y otro arquero de primer nivel (Malumbres). Una primera línea de lujo: uno de los mejores centrales de Europa (Larsson), una figura a punto de explotar (Grebenar) y un zurdo imparable cuando se lo propone (Stankovic). Además, rotaciones de nivel. Los pivotes no hace demasiado tiempo eran los más solventes de la Asobal. Y en las esquinas, yo prometo que he visto volar y meterlas todas a Cartón, Stojanovic se va acercando cada vez más al de Logroño, y Amadeo disfruta de su segunda juventud. Eso sí, no solo hay que ganar; es imprescindible obtener un resultado holgado. En Bregenz se habla alemán... El idioma en el que se han articulado todas las derrotas del CAI Aragón. Lo dicho, esta tarde comienza la aventura.