El director general de Deporte del Gobierno de Aragón, Álvaro Burrell, uno de los más destacados decatletas que ha tenido España, ha dicho que espera que "todo el peso de la ley" caiga sobre quienes, en el ámbito de la alta competición deportiva, buscan atajos, hacen trampas o persiguen lucrarse con prácticas de dopaje.

Burrell, quien participó en los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992, ha comparecido ante la Comisión de Educación, Cultura y Deporte de las Cortes de Aragón para explicar la política de apoyo a los deportistas aragoneses de alto rendimiento, la ayudas económicas, de formación y médico-científicas.

Burrell ha aprovechado su comparecencia para hacer una "encendida defensa" del deporte de alta competición, en un momento de dificultades por la reciente red de dopaje destapada en España y que implica, supuestamente, a destacados atletas como Marta Domínguez, médicos y entrenadores.

El director general ha reivindicado que el deporte de alta competición "es bueno" para la sociedad, y que la búsqueda de la excelencia deportiva es un buen ejemplo para los niños, porque implica "marcarse objetivos, hacer sacrificios y aceptar logros y fracasos".

En este contexto, ha recordado que desde hace unos años se puede perseguir por ley a esos "pocos" que buscan atajos y que sólo quieren lucrarse y hacer trampas, haciendo "mucho daño" al atletismo.

Por ello, ha dicho que, aunque le "gustaría" que no estuvieran implicadas personas "emblemáticas", si al final se demuestra que es así es partidario de que sobre ellos caiga "todo el peso de la ley", para que "recapaciten" después de haberse convertido en "un ejemplo de lo que no hay que hacer".