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El Bada Huesca confía en la permanencia y ya mira al futuro inmediato

El club ha lanzado las metas de la siguiente temporada, en la que se quiere ahondar en la profesionalización y alcanzar los 1.500 socios.

Bada Huesca-Anaitasuna
Los jugadores del Bada Huesca, durante un tiempo muerto.
Javier Navarro

El Bada Huesca quiere cerrar de forma matemática la temporada este sábado con una victoria o un empate salvadores ante el Bidasoa Irún y ya mira al futuro más inmediato. El presidente, Pachi Giné, ha presentado este jueves un balance esperanzado y una mirada positiva al pasado desde su fundación en 1995. Lo ha hecho en un acto en que ha reunido a los patrocinadores de la entidad y ante quienes ha afirmado que la permanencia es “segura”. Hace un año se inició el proceso de profesionalización del club, agarrado al apoyo privado como sustento sin el que no se entendería el proyecto rojillo.

El gerente, Néstor Oliva, ha valorado esta como una campaña “muy especial e intensa”, por la emoción que se está viviendo en los partidos y, sobre todo, “por las iniciativas puestas en marcha para conseguir que el producto llegue a cada vez más personas”. Para el Club Balonmano Huesca, el balance es “más que positivo” y estos primeros pasos de cambio en todos los estamentos se tildan de prometedores. El salto desde las ligas regionales a la Asobal ha sido posible además “con la superación de la barrera de los mil socios” y los recursos que aporta el apoyo de los patrocinadores.

Los tres objetivos pasaban por aumentar la estructura del club, mejorar la visibilidad con acciones como la apertura de una nueva sede e incrementar la masa social. “Nos interesa que haya cada vez más gente a la que le guste al balonmano y venga al Palacio de los Deportes”, ha sintetizado Oliva. En el plano deportivo, y a dos jornadas para que concluya la temporada, los jugadores entrenados por José Francisco Nolasco reciben este sábado a los irundarras y cumplirán con la última fecha del calendario en la pista del Cangas, del que los separan dos puntos y ocupa el puesto de promoción de descenso que se quiere evitar a toda costa.

El aumento de patrocinadores privados se ha ido dando a lo largo de todo el curso, y otro objetivo cumplido se considera el respaldo de los medios informativos. Todo empuja para que se haya dado un ambiente de gala en los partidos caseros. “Estos tienen que ser los pilares fundamentales del curso que viene”, ha añadido un Oliva que ha adelantado el lanzamiento de una campaña de socios con la que se querrá alcanzar la cifra de los 1.500 abonados que se dieron con el ascenso a la Asobal. Esto se debe ir acompañando de los saltos que siga dando la asociación de clubes, con un papel preponderante de los propios equipos, y del aumento del plan de negocio con la captación de más capital privado.

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