El Bada Huesca pone fin a la pretemporada de invierno. Tras el parón propiciado por la disputa del Mundial, los altoaragoneses arrancan este domingo la segunda vuelta de la Asobal visitando al Frigorificos Morrazo (19.00), antepenúltimo clasificado. Después del buen arranque de la temporada, que le ha llevado a situarse en el ecuador como sexto clasificado a un punto del segundo, el bloque oscense confía en al menos poder replicar a partir de ahora los resultados para llegar al final con opciones de entrar en las competiciones europeas.

"Empezamos la segunda vuelta con muchas ganas, habiendo entrenado bien y con casi todos los jugadores recuperados", avanzó el técnico José Francisco Nolasco antes de poner rumbo a la localidad pontevedresa de Cangas de Morrazo. Ese 'casi' hace referencia al extremo Quique Camas, que no se ha podido desplazar por lesión.

Enfrente, el Bada tendrá un rival necesitado de puntos por el que Nolasco siente respeto. "Aunque esté en la parte baja, su pista ha sido tradicionalmente un fortín en el que será muy difícil ganar", advierte, explicando que el duelo será "duro", porque para ellos es "importantísimo conseguir los puntos". Además, considera que en el momento del calendario en el que llega el choque hace que sea más complicado aún ya que el entrar en el segundo acto del curso hace que "si pierdes no haya posibilidad de recuperación".

El preparador ilicitano destaca de los gallegos que "son un equipo bastante completo y equilibrado, dentro de sus posibilidades". "Tienen una defensa 6-0, que en ocasiones es 5-1, sólida y una buena portería con Díaz", valora sobre su desempeño a la hora de evitar los goles. Adelante, "le dan mucha continuidad al juego y aprovechan las oportunidades que les da el rival". Los nombres a tener en cuenta son Chapela, Soliño, Cerqueira, Muratovic y Aranda.

En el partido de ida en el Palacio de los Deportes en el inicio de la temporada el resultado fue de 25-21. Aquel 7 de septiembre resultó fundamental la defensa. Adelante, el principal artillero oscense fue Carmona, con siete goles.