FÚTBOL

Ametrallado el autobús de la selección de Togo

El conductor del autobús que transportaba la selección de fútbol de Togo murió y nueve personas resultaron heridas ayer en el ataque a la expedición togolesa que se desplazaba a Angola, donde mañana comienza la Copa de África. La acción fue reivindicada por las Fuerzas de Liberación del Estado de Cabinda, un grupo armado que opera en la frontera entre Angola y el Congo, que indicó que el ataque iba dirigido contra "las fuerzas armadas angoleñas que escoltaban a la selección de fútbol de Togo", según un comunicado difundido por la agencia de prensa Lusa y firmado por Rodrigues Mingas, secretario general de la organización. También añadía que esta operación "es sólo el principio de una serie de acciones que continuarán en el conjunto del territorio de Cabinda".

 

"Un conductor resultó muerto y nueve miembros de la delegación, incluyendo a dos jugadores, resultaron heridos. Los otros heridos son miembros de la dirección deportiva, administrativa y médica", declaró Willy Dogbatsé, presidente del Comité de Movilización de Fondos para el equipo de fútbol de Togo.

 

"Fuimos ametrallados a la salida de Congo, recibimos balas, estábamos entrando en Angola, nos dispararon una ráfaga por delante del autobús y nos tiramos al suelo" explicó Thomas Dossevi, uno de los jugadores del equipo. Según el futbolista, hay dos jugadores heridos: "Uno recibió una bala en la espalda, otro en los riñones". El entrenador de los guardametas y el doctor también fueron alcanzados. "No tenemos noticias, están en un hospital de Cabinda", explicó.

 

El jugador explicó a la cadena Infosport que los jugadores heridos eran el guardameta Kodjovi Obilalé, del club francés GSI Pontivy, y el defensa Serge Akakpo, del rumano Vaslui FC, "que recibió una bala en la espalda". "No tenemos noticias" de Obilalé, "sangraba mucho", dijo Dossevi a la televisión. Por su parte el centrocampista Alaixys Romao, que juega en club francés de Grenoble, explicó a Infosport que no todos los días los jugadores de fútbol son ametrallados. "Creemos que solo pasa en las películas. No entiendo porque nos pasó a nosotros. Hay jugadores y miembros del cuerpo técnico heridos, estamos esperando noticias" añadió.

 

La selección de Togo tenía que jugar su primer partido del torneo africano el próximo lunes contra Ghana, en Cabinda. "No sé cómo fue la operación (en el hospital). Si podemos boicotear la Copa de África de Naciones, tenemos que hacerlo. Sería mejor anular todos los partidos. Solo pensamos en volver a casa", dijo Romao.

 

Sin embargo, a última hora de ayer, la Confederación Africana de Fútbol no estaba dispuesta a suspender la competición. El enclave de Cabinda, provincia angoleña petrolífera situada entre la República Democrática del Congo y Congo-Brazzaville, está inmersa en un conflicto separatista desde la independencia de Angola, en 1975. "FLEC no existe hace tiempo. El atentado proviene de ciertos individuos que quieren causarnos problemas", dijo un responsable del gobierno angoleño.