REAL ZARAGOZA

Aguirre: «La presión pone una losa encima de los jugadores»

Aguirre dio por bueno el punto y justificó la evolucion conservadora de su equipo a lo largo del partido de Gijón

Aguirre da indicaciones a sus hombres.
Aguirre: «La presión pone una losa encima de los jugadores»
ALBERTO MORANTE / EFE

En un día donde, a priori, todo el mundo asumía que solo servía la victoria, Javier Aguirre, con rostro serio, quiso encontrar al final del partido amarres positivos en empate a cero obtenido en Gijón y, sobre todo, a la imagen ultradefensiva que el Real Zaragoza dejó en El Molinón en el segundo tiempo.


«La primera parte y la segunda fueron bien distintas. En la primera, salimos muy bien, tuvimos un par de ocasiones y presionamos. Me da la sensación de que, en el segundo tiempo, el equipo se organizó mejor defensivamente porque no quiso regalar esos metros que el Sporting en casa aprovecha muy bien. Y, a final de cuentas, logramos un punto que, en la zona en la que nos encontramos, no es malo», comenzó explicando el mexicano en la sala de prensa.


«Creánme que la presión atenaza al equipo. Cuando se vuelve a estar en descenso, cuando estás ante un rival directo, cuando te encuentras con un campo tan presionante como este, era importantísimo no perder. Como se vio en la primera parte, no era esa nuestra intención inicial. Pero, al final, la presión pone una losa encima de los jugadores», siguió justificando el entrenador zaragocista a sus pupilos. Y su argumentación no quedó ahí. Aún tuvo más recorrido. «Los jugadores, de repente, toman decisiones bajo ese estado presionante que no son las más adecuadas. Ya dijo la semana pasada el míster del Atlético de Madrid (Quique S. Flores) que veía al Zaragoza muy angustiado. Yo intento, todas las semanas, liberarlos y que la presión caiga toda sobre el entrenador, porque yo no juego», añadió al respecto un Aguirre más trascedente que nunca.


«Lo ocurrido en la segunda parte es de esas cosas raras que tiene el fútbol. He metido dos cambios aparentemente ofensivos (Braulio y Uche), intentando ganar. Y lo que sucede es que el equipo rival se acaba sintiendo mejor. Encontrando la fórmula para liberarse más y nos fueron metiendo atrás, asumiendo cada vez más riesgos. Y nosotros prácticamente no tuvimos ninguna posibilidad de gol, aun a pesar de tener ahí esos dos delanteros. Intentando ganar el partido, dio la sensación de que nos echamos más atrás con ese par de cambios cuando, evidentemente, no era esa mi intención», señaló Aguirre para intentar dar una explicación a la paradoja que anoche se vivió en El Molinón.


El preparador blanquillo tuvo que hablar de lo que el futuro inmediato prepara al Real Zaragoza. El partido del miércoles ante el Athletic en La Romareda y la cadena de choques de alta dificultad que depara marzo: Barcelona, Valencia y las salidas a Mallorca y Sevilla. «Quedan 13 jornadas y nosotros debemos hacer 15 puntos más. Esa es la única lectura válida. Ahora ya pensamos con énfasis en el Athletic. Y ya sé que tengo sancionado a Diogo. Y a un montón de jugadores con cuatro tarjetas amarillas. Pero todo el año está siendo así. Cada partido es una final, un sufrimiento cada semana, sin parar de hacer cuentas, sumas y restas. Vamos a intentar recuperar el nivel que nos dio puntos en enero», pensó en voz alta Aguirre.


El Vasco, rememorando aquellos triunfos ante la Real, el Levante, el Málaga y el Deportivo, citó explícitamente lo que está echando en falta en el último mes. «El equipo trabaja mucho defensivamente, hace bien las cosas sin balón, pero ofensivamente nos faltan cosas y no encontramos la fórmula. Y eso que tenemos tres delanteros. Tendré que seguir indagando», concluyó.