JUNTA DE ACCIONISTAS

Agapito Iglesias: "No valoro la posibilidad de dejar el Zaragoza"

El Real Zaragoza ha celebrado esta mañana la junta de accionistas ordinaria, en la que a pesar de la voluntad popular se han aprobado las cuentas y se ha renovado el Consejo de Administración.

Paco Checa, Agapito Iglesias y Javier Porquera
Agapito Iglesias: "No valoro la posibilidad de dejar el Zaragoza"
TONY GALAN/ EFE

El Real Zaragoza ha celebrado esta mañana la junta de accionistas ordinaria del club. Sumido en un trágico momento en lo deportivo e inmerso en situación concursal con una deuda de 145 millones de euros reconocida en el Boletín Oficial del Estado, la cita ha servido para comprobar, una vez más, la profunda ruptura entre el máximo accionista y el resto de pequeños propietarios.


Javier Porquera ha sido el encargado de leer, una tras otra, las pertinentes anotaciones y valoraciones presentadas por la entidad en el dossier que resume las cuentas anuales correspondientes al curso 2010/2011. Por parte del consejero todo han sido parabienes y lecturas optimistas de la gestión de la cúpula zaragocista, que ha presentado un resumen de resultados "mejor" que el de la campaña anterior. En él se expresa una diferencia positiva de 20 millones de euros (-32 millones de la 2009/10 por -12 de la 2010/2011). Unas cifras que, a pesar de mejorar, no dejan de aportar un saldo negativo.


Los asistentes habían preparado la cita a conciencia. No ha habido página, balance ni epígrafe que no haya sido cuestionado por los zaragocistas citados en el pabellón multiusos Alfonso Solans Serrano. Inmueble que, por cierto, también ha contado con su momento de protagonismo al darse a conocer la cantidad anual que el Real Zaragoza abona por su arrendamiento (840.000€).


Estos datos, sin embargo, no han convencido a ninguno de los presentes. Así ha quedado patente tras las cerca de tres horas de intervenciones, acusaciones, ruegos, exigencias y preguntas que accionistas minoritarios, consejeros delegados y el propio Agapito Iglesias han cruzado en una tensa sesión en la que la que el presidente de la entidad ha dejado una puerta entreabierta a una posible marcha. Puerta que, sin embargo, ha cerrado minutos más tarde con vehemencia en la rueda de preguntas ante los medios de comunicación.


Poco ha importado la disconformidad y beligerancia del conjunto de la concurrencia, ya que Agapito, al contar con más del 90% del accionariado, se ha bastado y sobrado para aprobar las cuentas anuales, así como la gestión social y aplicación del referido ejercicio.


Asimismo, tras un alegato en el que ha señalado que no es posible llevar a cabo una ampliación del Consejo de Administración debido al momento económico del club, Iglesias ha vuelto a hacer efectiva su 'minoría absoluta', en la que la voluntad de la mayoría no ha podido con la intención del dueño de nueve de cada diez títulos. Agapito ha añadido, no en vano, que "si avanza el convenio anticipado" darán "paso a que el consejo se abra a más personas, que tendrán funciones claras y nítidas".


Descenso y crisis, "motivos" de la deuda


Según Javier Porquera, "los motivos por los que se ha llegado a esta situación son múltiples, aunque básicamente se resumen  en 3 ó 4". Por un lado, Porquera encuentra el origen de todos los males en "los 70 millones de deuda" que dejó la gestión del anterior propietario, Alfonso Solans. Déficit al que, según el consejero, debe añadirse "el último descenso a segunda", "mantener una plantilla competente para ascender rápidamente" y "la crisis económica".