REAL ZARAGOZA

Agapito Iglesias no tira la toalla y quiere conformar un equipo para ascender

La pelota está ahora en el tejado de Agapito. Después de dos temporadas parapetado tras los diques que suponían Eduardo Bandrés (en lo institucional) y Miguel Pardeza (en lo deportivo), el máximo accionista de la entidad deberá comenzar a mover ficha y a tomar decisiones, algunas de ellas traumáticas.


En las últimas semanas, el soriano ya había comunicado a su círculo de confianza que proseguiría con el proyecto se descendiera a Segunda o no. Ayer lo corroboró públicamente Eduardo Bandrés: "Me ha dicho Agapito Iglesias que el proyecto sigue adelante y que haremos un equipo para ascender. Queremos desterrar la desconfianza que se haya podido generar. Con este descenso no se producirá la quiebra del club. El proyecto seguirá y Agapito también. Eso es seguro".


Una firme declaración de intenciones que deberá transformarse en hechos y en medidas concretas. Sobre la mesa de Agapito se acumulan los 'deberes'. En primer lugar, deberá pronunciarse sobre la continuidad del presidente Eduardo Bandrés, que ayer puso el cargo a su disposición.


También están en el aire los puestos de Miguel Pardeza, como director deportivo, y de Pedro Herrera, como secretario técnico. Ellos son los arquitectos futbolísticos de una aventura que ha concluido en Segunda. En caso de cese, habrá que buscar urgentemente a sus sucesores. El regreso a Primera no puede dilatarse y urge trabajar para reunir los mimbres para acometer el regreso a la elite.


Otro tema caliente en manos de Agapito Iglesias será el cierre de la operación acordeón y la posterior ampliación de capital que está prevista. A este respecto, los pequeños accionistas del club valoran la posibilidad de emprender algún tipo de acción para frenar dicho proceso que consideran negativo.