Pesadilla en Reyes para Carlos Sainz
Dos accidentes paralelos del español y de Peterhansel dejan el camino expedito a Al-Attiyah para la victoria final, mientras Barreda resiste cerca de la cabeza en motos.
Una frase muy propia de reyes, "así se las ponían a Felipe II (o a Fernando VII)", se podría usar para el Dakar, sustituyendo a los monarcas españoles por un príncipe catarí. Nasser Al-Attiyah va irremediablemente encaminado a conquistar el Dakar 2023 después de que la sexta etapa del raid más duro del mundo se cebase con sus rivales directos. En una jornada acortada por las copiosas lluvias que cayeron en la zona, y que también han modificado las etapas séptima y octava de este fin de semana convirtiéndolas en una 'semimaratón' (habrá asistencia en el campamento de solo dos horas), los Audi de Stéphane Peterhansel y Carlos Sainz han quedado fuera de la lucha por el título de este año.
En el caso del 14 veces campeón del Dakar, de manera definitiva, ya que se vio obligado a abandonar por la evacuación médica de su copiloto, Edouard Boulanger. Tanto el francés como Carlos Sainz sufrieron dos accidentes paralelos en la misma zona, en torno al kilómetro 212, tras saltar una duna. En el aterrizaje, Sainz rompió la suspensión delantera de su coche y arrancó una rueda, y aunque el caso de Peterhansel fue similar, la afectación física para su copiloto fue crítica. Aunque su coche estaba aparentemente mejor, era inviable seguir por los dolores del navegante, que tuvo que ser atendido allí mismo.
Sainz tuvo que esperar varias horas a que pudieran llegar las asistencias, reparar lo dañado e intentar reemprender la marcha, si bien ya daba igual: sus opciones a victoria se habían esfumado. A falta de nueve etapas aún por delante, el tiempo a recortar es demasiado amplio como para esperar a que la suerte se le vuelva de golpe. A sus 61 años, y con el runrún de una retirada definitiva cada vez más cerca, este ha sido un varapalo muy duro de digerir para el 'Matador', señalado en este Dakar no solo por su edad o su candidatura, sino incluso por la presencia de su hijo, el piloto de Ferrari en Fórmula 1, que casi le cuesta una sanción. La FIA investigó si la ayuda de Sainz Jr. a cerrar la puerta del Audi de su padre era considerada una asistencia ilegal y, por tanto, penalizable, pero los jueces no quisieron romper la competición de esta manera.
Todo lo ocurrido en este día de Reyes fatífico para Audi benefició a Al-Attiyah, que se llevó una victoria de etapa que sabe a mucho más. Sebastien Loeb, que en la general está a un mundo, fue segundo a tres minutos y medio, pero la desventaja que tiene en la clasificación del raid es demasiado amplia. Al-Attiyah, cuatro veces ganador del Dakar, tiene más de una hora de margen sobre el segundo clasificado, Henk Lategan, que además es su compañero (y escudero) en el equipo oficial de Toyota y, presumiblemente, no le pondrá las cosas difíciles en caso de un eventual problema. Una avería catastrófica o un accidente es lo único que puede evitar que Al-Attiyah se alce con su quinto 'Touareg'.
Ni siquiera un medio-rival como podría ser el local Yazeed Al-Rajhi, que compite para la estructura Overdrive (con Toyotas semioficiales), podrá ser un enemigo para Al-Attiyah, ya que unos kilómetros más allá de la zona negra para los Audi él mismo acabó fuera de carrera. Más fácil, imposible para Nasser.
Barreda resiste
En motos, aún con el susto en el cuerpo por el grave accidente que tuvo al final de la quinta etapa, Joan Barreda se mantiene en plena competición por la victoria. Con algo más de cautela, el castellonense llegó cuarto a poco más de dos minutos y medio del vencedor del día, Luciano Benavides, al que las bonificaciones permitieron arrebatar la victoria parcial a su compañero Skyler Howes, que sigue líder de la general, con tres minutos y medio de margen sobre Toby Price. Barreda sigue fuera de la zona de podio, a 11 minutos del estadounidense de Husqvarna, pero siendo irónicamente la primera Honda de la clasificación. Tras quedarse fuera del equipo oficial, el de Torreblanca está sacando el pundonor que le hizo ser el líder de la escuadra hace no mucho y de momento es el primer espada del equipo.
La jornada de este sábado será de 333 kilómetros en lugar de los 398 previstos y que iba a ser el recorrido del domingo, con salida en el vivac de Riad que ya será la base de este Dakar hasta el martes. La que iba a ser la etapa más larga de este Dakar, el bucle de Al Duwadimi, queda para el domingo, con 345 kilómetros cronometrados y no los 473 previstos. Menos distancia tendrá que recorrer Al-Attiyah de camino a su victoria final.
