piragüismo
Se suspende el Descenso Internacional del Cinca a causa de la sequía
El escaso caudal del río habría supuesto un riesgo para los participantes de esta prueba de piraguas, que estaba prevista el próximo 21 de agosto.
El comité organizador del Descenso Internacional del Cinca ha acordado suspender la celebración de la 24 edición de la prueba, que iba a celebrarse el domingo 21 de agosto, debido al escaso caudal que aporta el río a causa de la sequía y ante el riesgo que esta situación supone para los participantes, tanto en la modalidad competitiva como en la popular. Ha tomado su decisión a la luz de los informes negativos de los equipos y cuerpos de seguridad, y con el apoyo de los clubes y federaciones implicadas en la competición.
La suspensión de la prueba ha sido hecha pública este viernes en una en una rueda de prensa a la que han asistido el presidente de la entidad comarcal, Marco Ibarz, junto a su consejero de Deportes, Héctor Alonso, así como representantes de los ayuntamientos de Fraga, Mequinenza y Torrente de Cinca.
En la comparecencia de prensa se hacho referencia a la reunión mantenida el pasado miércoles entre bomberos de las diputaciones de Huesca y Zaragoza, agentes de la Guardia Civil, policía local de Fraga, personal de Protección Civil de la comarca y bomberos del Sercat, durante la que se puso de manifiesto el mal estado del río en todo su recorrido debajo al bajo caudal existente.
En esta reunión se mostraron imágenes grabadas esa misma mañana con un dron en las que se podía observar la proliferación de algas provocada por las altas temperaturas, la gran cantidad de piedras que habían quedado al descubierto a causa del bajo nivel de las aguas, así como algunas modificaciones en el recorrido del cauce.
Los responsables de esta inspección informaron al comité organizador de que el caudal se encontraba a cuatro metros cúbicos, un volumen que a juicio de los expertos resulta "insuficiente" para el río genere la corriente necesaria para arrastrar las embarcaciones de la modalidad popular.
Además, los responsables de la seguridad de la prueba señalan en su informe que el bajo caudal hace aflorar piedras que hacen peligrar la integridad de los palistas y de las piraguas.
Y advierten de que en los tramos en los que hay saltos no se pueden realizar estos días con la piragua, por lo que sería necesario atravesarlos a pie, "con la peligrosidad que conlleva el sobrepasarlo, pues los palistas se pueden quedar atrapados en los remolinos que allí se generan".
Según los bomberos que realizaron la inspección del cauce, la falta de caudal suficiente no sólo exigiría realizar continuos porteos a pie de las piraguas que llevarían al agotamiento a los participantes, sino que obligaría a un esfuerzo "mayúsculo" para remar sin corriente.
A juicio de estos expertos, las características actuales del río harían de la jornada de la prueba "no de diversión sino más bien de peligro y sufrimiento". Dos días antes de la reunión de seguridad, la entidad comarcal solicitó a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) que estudiara la posibilidad de liberar agua de los embalses ubicados aguas arriba del cauce, petición que fue desestimada por el Organismo de cuenca debido a la grave situación de sequía que afecta al país.
El presidente de la Comarca del Bajo Cinca ha expresado su tristeza ante la decisión adoptada de suspender la prueba, pero ha reconocido al tiempo que a causa del bajo caudal del río "no podemos garantizar ni el buen funcionamiento de la prueba ni la integridad física de los participantes".
Por su parte, el consejero comarcal de Deportes ha explicado que la decisión de suspender la prueba ha sido "muy estudiada, muy debatida entre todos los implicados, que no se ha tomado a la ligera y en la que hasta el último momento se ha mantenido la esperanza de poder seguir adelante".
