La pasión por la bicicleta toma savia nueva en Calatayud

Bicicleta (mucha bicicleta), diversión, deportividad y amistad. Estos son algunos de los componentes que se han dado cita en la primera edición del Encuentro Interescuelas de Ciclismo, organizado en Calatayud por el Club Ciclista Bilbilitano. Se trata de un evento que arrancó este sábado y que acabó este domingo, y en el que han participado cerca de una treintena de jóvenes, acompañados de sus familias, provenientes de Zaragoza, Tarazona o la ciudad anfitriona, entre otros puntos de origen.

«El objetivo principal es que los niños de las escuelas se conozcan, se hagan amigos, fomentar la deportividad y el compañerismo», sintetizaba Javier Burdío, uno de los padres de la Escuela del Club Ciclista que se han encargado de la organización del evento, y quien confiaba en que «el año que viene seguro que creceremos». Asimismo, reconocía que «también buscamos dar a conocer zonas de Calatayud e impulsar la zona de BTT de Armantes». Por su parte Enrique Herrero, entrenador de la Escuela Ciclista Zaragoza, reconocía que «lo importante es que los chavales se conozcan entre sí y hagan amigos también fuera de su club».

Y es que el entorno compuesto por las formaciones erosionadas de este paraje bilbilitano han sido uno de los grandes atractivos de la cita. «No conocía las rutas pero me han gustado», explicaba Julia Redondo, de 13 años. Otro de los participantes que se mostraba satisfecho con «las sendas y las bajadas» elegidas era Jorge Cebrián, zaragozano de 12 años. En el caso de Raúl Marqueta, también de la capital aragonesa, además de las salidas en bicicleta, se quedaba con «las actividades, como el arbolismo o paintball, porque hicimos equipos y varios juegos».

Para Ángel Moreno, de Zaragoza, reconocía que acudir a un encuentro así «le apetecía» y que el resultado ha sido «que me lo he pasado muy bien», como parecían atestiguar las gotas de barro que salpican su indumentaria. Por su parte, Regi, de 16 años y también de Zaragoza, confesaba que «me quedo con la tirolina, y con el desayuno con los compañeros», y también indicaba que le habían gustado los talleres de primeros auxilios «porque es una forma de aprender a ayudar a los demás».

Desde Novallas y Tarazona, Marcos Grijalbo y Aarón Giménez, también valoraban haber podido participar en el paintball. En el caso de Marco Latorre, turiasonense de 7 años, además de los juegos se mostraba muy contento con el recorrido por Armantes. Pero además de los más pequeños, sus acompañantes también han podido contar con alternativas para pasar los tiempos de espera.

En el caso de Beatriz Bobé, de Zaragoza, incidía en que «estas actividades les gustan mucho porque les va la bicicleta, pero así se juntan con otros compañeros, y aunque hay competitividad fuera de la carrera se llevan muy bien». Así, reconocía que «a nosotros nos gustan estos eventos y tan bien organizados como este».