Ya está todo listo para el inicio de la Baja Aragón, que hoy da su pistoletazo de salida con la etapa prólogo. Una prueba de diez kilómetros que servirá para confeccionar el orden de salida de la carrera aragonesa. Durante la pasada jornada se ultimaron los detalles para el comienzo de esta prueba, que celebra su treinta y cuatro edición y que por quinto año consecutivo tiene como escenario la provincia turolense.

El Palacio de Exposiciones y Congresos de Teruel se ha convertido, un año más, en el centro neurálgico de la competición hasta el próximo domingo. Los equipos participantes se trasladaron ayer hasta este lugar, para llevar a cabo todas las revisiones mecánicas previas y las verificaciones pertinentes. Aunque esta puesta a punto de los vehículos "no es cosa de un día, sino de un mes de duro trabajo", como explicaba uno de los mecánicos de este evento. "La Baja es una de las últimas carreras de la temporada, por lo en ocasiones se tiene que desmontar el vehículo entero para que pueda competir", afirmaba.

Tanto para los equipos, como para la organización de la prueba las horas previas al inicio de la carrera son el preludio de todo el esfuerzo y el trabajo que depararán los próximos tres días de la competición. Como afirmaba el director de carrera, Manuel Vidal, en este día previo al inicio "ya se va poniendo en marcha toda la maquinaria de la prueba". Una maquinaria que este año es más completa que nunca, ya que los índices de inscripción han batido récords. En total, 230 vehículos participaran en esta edición, un 20% más que en la anterior.

Para el director de carrera "este éxito de inscripción es una prueba de la consolidación de la Baja en Teruel". Y es que, con estas cifras de participación la Baja Aragón se ha posicionado como la carrera más numerosa de todo el calendario del Mundial de Cross Country FIA y una de las más importantes del sector. Prueba de ello son sus participantes. Esta cita cuenta entre sus filas con trece de los mejores pilotos de la actualidad internacional, que acuden desde todos los lugares del mundo. Entre estos destacan el qatarí Nasser Al Attiyah, en coches, y el español Joan Barreda, en motos, que intentarán volver ser los vencedores, como en la pasada edición. Un logro que no era nuevo para los conductores, ya que ambos suman respectivamente dos y tres victorias en Aragón.

"La competición es una de las más importantes del panorama nacional. Para todos los participantes el objetivo final es poder llegar al Dakar y encuentran en la Baja un paso inicial para poder conseguirlo", explicaba Vidal. Este año este objetivo final está más cerca que nunca, ya que la Baja presenta el desafío Dakar Challenge, una oportunidad única para las jóvenes promesas que oferta una inscripción gratuita para el Dakar 2018. Esta novedad es una gran ocasión para los participantes de la modalidad de coches, pero también una presión añadida, ya que solo se oferta una plaza. Xisco López, uno de los competidores de buggies en la categoría nacional, se enfrenta a este desafío desde una posición completamente diferente. "Vengo a disfrutar de la carrera y a tomármela con calma, porque realmente no nos jugamos nada" explicaba el conductor, que se ha trasladado desde Galicia para asistir a esta edición.

Durante tres días, los participantes se van a enfrentar a 800 kilómetros, de los cuales 600 serán cronometrados. En total, durante las cuatro etapas del recorrido, los corredores pasarán por 31 municipios de cuatro comarcas de la provincia: el Jiloca, la Comunidad de Teruel, las Cuencas Mineras y la Sierra de Albarracín. Como en todas las ediciones, el recorrido de la carrera se mantiene secreto y se irá revelando por días. Ayer se dio a conocer la ruta de la etapa de prólogo, que comenzará hoy a las 17.00. Esta es muy similar a la de la pasada edición. Se dará una variación de dirección en el inicio pero se desarrollará en la misma zona del año pasado, a escasos kilómetros de la capital. De cara a las próximas jornadas, los únicos detalles que se conocen del recorrido son que será distinto al de otros años y que estará dividido en dos tramos el sábado y uno el domingo, que no coincidirán entre ellos.