Gonzalo ‘Lalo’ Arantegui ejerce desde ayer como máxima autoridad del área deportiva del Real Zaragoza. Después de una semana de gestiones, el club confirmó su incorporación con rango de director deportivo a media tarde, horas después de que Lalo abonara los 25.000 euros de la cláusula de rescisión del contrato que le unía hasta el 30 de junio de 2019 con el Huesca.

Una vez formalizada la documentación de su desvinculación de la entidad oscense, Lalo firmó con el Zaragoza también hasta el 30 de junio de 2019. Este mediodía, en La Romareda, será presentado. Junto a él, aún no estará José María Barba, pendiente todavía de resolver su desenganche del Huesca. Barba, cuya incorporación, en principio, se producirá en los próximos días, asumirá la secretaría técnica y su llegada al Zaragoza es una sugerencia personal de Lalo Arantegui.

El Zaragoza valora de su nuevo director deportivo su trabajo durante 18 meses en el Huesca, club que se ha asentado en la categoría y en el que ha encabezado una gestión deportiva con abundantes frutos a bajo coste: Samu Saiz, Aguilera, Alexander González, David Ferreiro, Gonzalo Melero, Jair, Sergio Herrera, Álvaro Vadillo, Darwin Machis…

Todos ellos futbolistas con poso y capacidad en la Segunda División. Esta dinámica de trabajo ha convertido a Arantegui en uno de los directores deportivos mejor considerados de la categoría. Hace unos meses, estuvo cerca de marcharse al Mallorca, que apostó fuerte por él, pero Lalo Arantegui acabó finalmente anteponiendo su continuidad en el Huesca. Su nombre era también objeto de deseo de otros clubes de Segunda División de cara a la próxima temporada.

Lalo representa una apuesta joven y ambiciosa (tiene 39 años), con conocimientos de la Segunda División y la Segunda B, pero también de las categorías inferiores del fútbol español. Reúne el perfil demandado por el club.

Asimismo es hombre con experiencia en el Zaragoza. Sabe el territorio que pisa. Pasó por la Ciudad Deportiva tras formarse en el Casetas y jugó como centrocampista en el filial, antes de alargar su carrera en Levante, Águilas, Gandía, Jerez de los Caballeros, Binéfar, Sevilla B, Conquense, Cultural Leonesa, Huesca, Estepona y Ejea. También conoce los despachos del Zaragoza.

Tras retirarse y ejercer brevemente de director deportivo del Ejea, comenzó a trabajar en la secretaría técnica por recomendación de Manolo Jiménez, quien le conocía de su etapa en el Sevilla. Allí compartió área (comisión deportiva) con Luis Carlos Cuartero, Santiago Aragón, Jesús Solana, Ander Garitano o Javi Suárez, hasta que los despidos impulsados por García Pitarch dentro del club durante la temporada 2013-2014 le sacaron del club. Comenzó a partir de entonces Lalo su labor en la secretaría técnica del Villarreal, con un trabajo de ojeador enfocado a las categorías inferiores.

Estuvo a punto de marcharse al Atlético de Madrid, pero la oferta del Huesca para asumir la dirección deportiva tras la marcha de Luis Helguera acabó por convencerle en verano de 2015.

A los pocos meses, Lalo incorporó como secretario técnico a José Mari Barba, un tándem que ha configurado al actual Huesca. Barba, de 31 años, también tiene pasado en el Real Zaragoza (jugó en su tercer equipo filial, el Universidad).

El Zaragoza quería que Lalo se integrara en su estructura organizativa cuanto antes, con el objetivo de trabajar ya en la planificación del próximo proyecto. Diseñar así el mapa de renovaciones, configurar un esquema con las necesidades de la plantilla y activar las primeras gestiones de posibles incorporaciones.

La elección de Lalo fue el último paso del Consejo de Administración dentro de la hoja de ruta fijada tras la salida de Narciso Juliá y Albert Valentín a principios de mes.

Lalo fue uno de los nombres sugeridos por el director general, Luis Carlos Cuartero cuando recibió el encargo del Consejo de buscar un nuevo director deportivo. Desde un principio, fue su opción predilecta, pero el club de La Romareda también valoró otras candidaturas, como la de Chema Indias, Luis Helguera, con quienes Lalo formó la terna final de ‘futuribles, u otros como Manolo Salvador y Óscar Perarnau.