Actualmente el viejo pabellón de El Parque vive con tranquilidad su día a día. Lejos quedan ya aquellos maravillosos años ochenta (y comienzos de los noventa) en los que la instalación de la capital oscense era una verdadera caldera humeante poblada de enfervorecidas almas. Allí el Magia Huesca se convirtió en una pesadilla para cualquier rival de la Liga ACB de baloncesto. Con el paso al Palacio de los Deportes, El Parque, que se llenaba en cada partido hasta los topes, quedó como un pabellón municipal para diferentes usos deportivos. Ayer, en cambio, el recinto recibió una visita muy especial, la de la Sociedad Deportiva Huesca, que por el frío se puso a cubierto en su sesión de trabajo, desarrollada por tanto en una porción de la historia en mayúsculas del deporte altoaragonés.

El parqué sobre el que brillaron baloncestistas tan recordados como Granger Hall o Brian Jackson acogió a los que en el presente son los grandes referentes en suelo capitalino. Porque en la mañana de ayer fueron los futbolistas los que trabajaron de un modo diferente en El Parque. El fútbol sala o algunos pinitos con el basket se pudieron contemplar en la zona operativa de tan singular escenario.

El Huesca decidió finalmente cancelar el entrenamiento que estaba previsto diera inicio a las 11.00 en el IES Pirámide. El hielo que había dejado la gélida noche altoaragonesa desaconsejaba su uso. De esta forma, los integrantes del conjunto azulgrana se dirigieron desde El Alcoraz a El Parque para trabajar allí abrigados y evitar circunstancias adversas derivadas del frío.

El portero suplente Queco Piña y el centrocampista Franck Bambock se quedaron en el gimnasio del estadio azulgrana, ya que ambos siguen recuperándose de sendas molestias físicas que les han impedido ser uno más en el grupo desde la pasada semana.

Hoy el Huesca ha retrasado a las 12.00 el comienzo del entrenamiento, que salvo que exista cambio de última hora tendrá lugar en el CPIFP Montearagón.

La ambición de Vadillo

Uno de los presentes en El Parque era el extremo Álvaro Vadillo, quien analizó la actualidad de su equipo y lanzó un mensaje personal cargado de ambición, tanto para lo propio como para lo colectivo.

El de Puerto Real desgranó sus sensaciones tras el cierre de la primera vuelta de la competición. "El balance es bastante positivo. En los últimos partidos nos han sacado de los puestos de ‘play off’, que sinceramente para mí es el objetivo que se tiene que marcar el club", opinó con rotundidad. Vadillo apoya sus palabras en que "vistos nuestros resultados y nuestro juego creo que tenemos bastantes posibilidades. Ahora estamos a tres puntos así que esperamos hacer una segunda vuelta un poco mejor para acabar en ‘play off’ y luchar por el ascenso".

También en la manga final desea el ex del Betis "acabar la temporada con mi mejor versión. Físicamente estoy casi al cien por cien y espero que veamos al mejor Alvaro Vadillo", aseguró.

Sobre el rival del sábado en casa, el Alcorcón (18.00), destacó el atacante azulgrana que pese a sus malos números ligueros como visitante "viene de ganar en Córdoba en Copa. La llegada de Julio Velázquez le ha dado un plus de optimismo".