Paco Franco Sorribes: "De pequeño, lloraba cuando no me montaban a caballo en pañales"

A usted le veo fenomenal, por tanto, le preguntaré por sus caballos. Porque su nombre significa en Zaragoza pasión por los caballos.

Siento una inmensa alegría ante el Concurso Hípico Nacional del Pilar. Se trata de la competición deportiva más antigua de las fiestas. Con la prueba que se desarrollará desde mañana hasta el domingo, ya van 112 ediciones. Desde 1986 se organizan en mi club, el Doble F. Anteriormente se organizaron en la Hípica Militar. Esta edición coincide con el 50 aniversario del club.

Toda una vida susurrando a los caballos...

Los caballos son mi pasión. Considero que lo esencial de la vida es la salud y la ilusión. Con salud e ilusión, se puede conseguir todo, hasta organizar 60 concursos nacionales en Zaragoza entre los del Pilar y los de San Jorge.

¿Dónde y cuándo nació su pasión equina?

Yo diría que desde que nací. Mi madre decía que, de pequeño, lloraba cuando no me montaban a caballo en pañales.

¿De pequeñito ya le gustaban los caballos?

Con 10 años ya domaba los caballos de mi padre, que era tratante. Mi padre vendía caballos al Ejército, a la Policía Municipal y a la Guardia Civil, que antaño iban a caballo. Hice el Servicio Militar en Caballería en Ceuta. Cuando regresé a Zaragoza, monté el club en 1966. Me fui a Sevilla en 1967 con mi amigo Manuel Escosa, y compramos 10 caballos de categoría. Fuimos para una semana. Nos quedamos 40 días..., pero esa es otra historia.

Y de 10 caballos y un corrico de unos metros cuadrados, al mayor club privado de España...

El mayor y el único privado. El resto de hipódromos de España son de propiedad municipal: igual el de Dos Hermanas (Sevilla), que el de La Zarzuela en Madrid o el de San Sebastián.

¿Y el de Sanlúcar de Barrameda?

Que yo sepa y hasta la fecha, Sanlúcar es un lugar precioso; pero las carreras de caballos de Sanlúcar se celebran en la orilla de la playa, o sea, en el suelo de todos los españoles. El club Doble F es de mi propiedad y allí pueden acudir todos los amantes de este maravilloso deporte.

Todo un privilegio para la ciudad de Zaragoza, sin duda.

Me siento profundamente zaragozano, aragonés y español. Para mí significa un orgullo inmenso haber sido el primer jinete civil federado en Aragón y que ahora haya más de 1.800 federados. Gracias los 75.000 metros cuadrados del club Doble F, he podido organizar en mi ciudad jornadas de carreras de caballos ingleses y árabes, carreras tipo Grand National con vallas y todo...

¿Vallas también? Vaya, vaya...

¡Hasta partidos de baloncesto a caballo!

¡Solo le queda montar a caballo en el Doble F a Pau Gasol!

No lo descarte (sonríe). Ya vino David Villa cuando jugaba en el Real Zaragoza...

¿Cómo calificaría la presencia olímpica de Pilar Cordón?

Es un hecho excepcional que no ha sido valorada en su justa medida. Estamos ante la primera amazona olímpica española en la especialidad de salto. Me hace muy feliz que esta gran deportista aragonesa también haya participado en el Concurso Hípico Nacional del Pilar. Igual que Luis Álvarez Cervera, seis veces olímpico. O Luis Altolfi. O Cayetano Martínez de Irujo.

La ‘crème de la crème’...

Y Pablo Hermoso de Mendoza, el número uno del arte del rejoneo, gran amigo mío. No lo dude, mientras Paco Franco viva, hará lo posible y lo imposible para que lo mejor de la equitación venga a Zaragoza. Como en el Concurso Nacional que mañana comienza.