Nadal también es humano

Aunque a veces no lo parezca, el número 1 del mundo tiene sus límites y en Australia está sufriendo con las altas temperaturas y una molesta ampolla en su mano que, según afirma, pone en peligro su torneo.

Nadal sufre en Australia
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A veces no lo parece, pero Rafa Nadal es humano. El tenista español tiene sus límites y, aunque sigue adelante en el Open de Australia, los está encontrando en la otra punta del planeta. Las altísimas temperaturas, los jueces y, sobre todo, una herida abierta en su mano que le impide jugar con comodidad están poniendo a prueba al número 1 del mundo casi tanto como sus rivales.


La mayor preocupación que tiene ahora mismo el español Rafael Nadal es la herida en forma de llaga en su mano izquierda, lesión difícil de tratar que según el tenista de Manacor pone en peligro su torneo. "No es doloroso pero sí es difícil de cubrir, y si lo hago me impide sentir la bola y la raqueta", dijo Nadal mostrando su mano abierta con la llaga en la parte superior del centro de la palma. "Si sigo así me la voy a destrozar", comentó.


Nadal explicó que hace unos días se inflamó pero ahora está "en carne viva" y que no puede permitirse el lujo de parar ni de dejar de entrenarse. "El torneo está complicado así porque necesitaría cinco días para que la piel se recuperase y juego dentro de dos días", advirtió el número uno del mundo. "Hay que prevenir y tratarla con todo lo que disponen los médicos, porque mi torneo está en peligro y no creo que pueda jugar sin vendaje el resto del torneo", aseguró.


Convencido de que tendrá que jugar cubriendo esa zona, Nadal asumió el riesgo. "Es verdad que se pierde un poco de sensibilidad, pero no voy a ganar ni a perder por eso", dijo. Sobre su próximo rival, el búlgaro Grigor Dimitrov, comentó que "está destinado a estar arriba" y que "tiene todo el talento para ser uno de los mejores de mundo y optar a ganar torneos como este".


Nadal, contra los jueces


Pero, además de su preocupación por la mano, Nadal se mostró molesto con los jueces, después de que le advirtieran en varias ocasiones por tardar demasiado en sacar. "Si estás jugando a 40 grados, no puedes esperar tener 20, 25 segundos para recuperarte. Si estás jugando intercambios de locura, no puedes tener 25 segundos para recuperarte, va en contra del espectáculo. Intentaré ser más rápido en el futuro, pero lo importante es tener gente en la silla que realmente entienda el juego y que la gente que gestiona este deporte entienda el juego. Estamos haciendo a los árbitros peores que antes con todo lo que estamos haciendo para facilitarles las cosas", criticó.


El número uno del mundo dejó claro que no quiere "cambiar ninguna regla". "Acepto que a veces soy lento, respeto esto, pero creo que, en mi opinión, no es correcta", indicó. Sobre uno de los 'warnings' recibidos, recordó que jugó un punto "muy, muy duro". "Corrí a cada pelota en una locura de punto, y luego tuvo que volver a jugar. Lo negativo no es el 'warning', es el momento, con 4-4 y 'deuce', puedes elegir otro momento para hacerlo", advirtió.


"Otra cosa es que la juez no me avisó antes del segundo 'warning' que estaba yendo lento. En mi opinión, va en contra del 'show'. No es sobre reglas o no reglas, la palabra es entender el juego, eso es todo. Necesitamos jueces que entiendan el juego. Las reglas no pueden ir en contra del buen espectáculo", zanjó el balear.