LIBROS

La ciencia para 'extraterrestres'

El escritor y profesor Javier Fernández Panadero acudió ayer a la librería Cálamo para impartir una sesión didáctica dirigida a niños

Javier Fernández y su ayudante Carlos Agiús explican un truco ante sus sorprendidos espectadores.
La ciencia para 'extraterrestres'
J. M. MARCO

Qué cae antes al suelo, una hoja de papel o una botella llena de agua? ¿Y si tiramos dos botellas iguales, una llena y otra vacía? Seguramente, la mayoría de los lectores responderían a las dos preguntas diciendo que caería antes la botella llena, aunque lo cierto es que en el segundo de los casos, las dos botellas caen a la vez. Así lo comprobaron ayer por la mañana un grupos de chicos y chicas, de entre cinco y nueve años que, acompañados de sus padres, acudieron a la librería Cálamo infantil, para participar en el taller sobre ciencia que impartió el profesor y escritor Javier Fernández Panadero.

Sin perder detalle de las explicaciones y los experimentos científicos del autor de '¿Cómo le explicó esto a un extraterrestre?' (Páginas de Espuma), los más pequeños comprobaron de primera mano que "una de las grandes ventajas de la ciencia es que da igual la opinión de la gente, porque la única verdad real es el resultado del experimento", apuntó Panadero.

Panadero, autor también del exitoso libro "¿Por qué el cielo es azul?", acercó la ciencia a los más pequeños a través de experimentos sencillos y ejemplos cotidianos, porque "a los niños de hoy en día, que lo han visto ya casi todo, no les sorprendes con cosas grandes, sino con lo inesperado", señaló. Y vista la reacción de los niños y sus padres, lo consiguió y lo que es más importante, involucró a los pequeños en sus experimentos.

El primero en romper el hielo fue Carlos Agiús, de ocho años, aunque para eso tuvo que competir duramente con su hermana Cillas, de cinco, que quería ser la primera ayudante. Él fue testigo de la prueba de las botellas de agua y, poco después, Pablo Labordeta ejerció de asistente para demostrar que si metes un huevo en vinagre, al cabo de unas doce horas, puedes hacerlo botar y después de despegar la cáscara, la yema y la clara siguen en perfecto estado. Más tarde les tocó el turno a Felipe, Jaime, Jorge y Nahia que salieron del taller convencidos de lo "divertida que es la ciencia".

"El objetivo de esa actividad y de los libros que hemos editado es aprovechar los conocimientos científicos para ahondar y meter el dedo en otras cuestiones de índole social, espiritual o psicológica. Así, se dan cuenta de que no podemos dividir la vida en compartimentos", matizó Fernández.

Tal vez por eso, en su último libro el autor le explica a un extraterrestre por qué beben pis en la Estación Especial, por qué una persona sola en medio de una carretera es un loco y cincuenta, una manifestación; y también, por qué los dibujos animados, que van desnudos durante todo el día, se ponen pijama para dormir.