ARTE

El museo de Calatayud se ampliará con un nuevo edificio

Destinado a almacenaje, abrirá espacio para los fondos hallados en las excavaciones urbanas de la zona, y también se prevé el acondicionamiento de la recepción.

Manuel Martín Bueno, director del museo, muestra la escultura de Livia en una sala del edificio.
El museo de Calatayud se ampliará con un nuevo edificio
JESÚS MACIPE

El Museo de Calatayud ampliará en 2009 sus horizontes. Inaugurado hace poco más de un año, con más de 6.000 visitantes en los últimos doce meses, el museo busca consolidarse como un eje dinamizador de la Cultura en la ciudad. "La respuesta del público ha sido buena -subraya Manuel Martín-Bueno, su director-. El edificio ha sorprendido mucho por su calidad y ya ha recibido un par de premios, el de Accesibilidad, porque es un inmueble que se puede recorrer de principio a fin por las personas con problemas para moverse; y también un accésit en el premio Ricardo Magdalena. Es un museo moderno y seguro, pero necesita aún un par de años de rodaje para que la gente lo descubra como el museo del siglo XXI que es".


En las próximas semanas el edificio va a ser objeto de obras. Por un lado, se va a acondicionar la recepción, tarea que había quedado pendiente y, lo más importante, se va a acometer una ampliación, que va a dotar al centro de una gran superficie para almacenes. Estas obras estaban ya previstas -el proyecto arquitectónico ya había sido redactado-, aunque la crisis económica hizo que quedaran pendientes de financiación. El fondo estatal de inversión local anunciado por el Gobierno para dinamizar el mercado laboral y paliar los efectos de la crisis ha sido la solución. Calatayud presentó la documentación en tiempo récord y el proyecto está aprobado: 600.000 euros para unos trabajos que tienen que estar concluidos antes de 2010. "El nuevo edificio, anexo al museo, nos permitirá disponer de 500 metros cuadrados divididos en tres plantas. Eso nos hará trabajar con mayor comodidad y que el museo no se quede pequeño de antemano". ¿Suficiente? Pues no. "El traslado a Calatayud de los fondos encontrados en las excavaciones urbanas, y que hasta ahora custodiaba la DGA, ha sido una gran noticia en lo museístico, pero ha supuesto la recepción de un montón de cajas que habrá que tener ordenadas. En estos momentos tenemos bloqueada la recepción de nuevos materiales porque no podríamos disponerlos en las condiciones adecuadas", subraya Martín-Bueno.


Progresos


Una selección de lo más destacado de ese material está ya en proceso de restauración: dos lararios, una colección de capiteles, una habitación pintada, un conjunto de una veintena de ánforas... "Ahora nos va a llegar, además, el duplicado de una inscripción que hace referencia a un bilbilitano y que se conserva en el Museo de Burdeos; y hemos pedido otra al Museo de Arlés". Mientras, y a través de la asociación de amigos del museo, se están comprando en subastas algunas monedas de Bilbilis que no están representadas en los fondos de la institución. A fin de año está previsto presentar la sala dedicada al mundo medieval, lo que puede presentar alguna dificultad añadida porque la mayor parte del material proviene de las excavaciones urbanas y ese material está pendiente de ordenar y restaurar. El museo ha recibido una donación de vitrinas de seguridad por parte del Arqueológico Nacional y se emplearán para exponer los materiales.


Todo esto se realizará sin afectar lo más mínimo a los visitantes, aunque el museo tiene un régimen un poco 'especial'. "En estos momentos el personal del museo lo integran un conserje a tiempo parcial, una persona con contrato laboral a jornada completa y el director -señala Martín-Bueno. No es lo ideal, pero no se puede pedir más al ayuntamiento para un museo recién creado, y menos en estos tiempos de crisis. Así que el régimen de visitas es escaso: el museo abre cinco días a la semana, cuatro horas al día, de 11.00 a 13.00 y de 18.00 a 20.00, y por eso la cifra de 6.000 visitantes es tan importante para nosotros. En cualquier caso, intentaremos ampliar el horario". El museo incorporará este año a sus salas distintos elementos de realidad virtual. Así, un trabajo conjunto entre el Grupo de Investigación Urbs y el Grupo de Ingeniería Informática de la Universidad de Zaragoza está realizando imágenes fijas y en movimiento de cómo debió ser Bilbilis en la Antigüedad.


A todo ello hay que añadir las actividades paralelas. "Creemos que Calatayud se merece un museo dinámico que ofrezca, además, atractivos culturales añadidos-concluye Martín-Bueno-. Luego serán los bilbilitanos los que nos dirán si estamos acertados o no".