La jardinería holística incluye agua, suelo, fauna... Y nosotros, unidos por los cinco sentidos

En este rinconcito de los jardines Kew, en Londres, se alimentan los cinco sentidos

Puede encontrarse en Netflix una serie que combina el humor, el misterio y el absudo con maestría: 'Dirk Gently', una especie de detective holístico que defiende la idea de que todo está conectado en el universo. No es una filosofía descabellada, la verdad:la sociedad es un ecosistema y los fallos en la educación, familias, justicia o economía tienen consecuencias insospechadas.

El concepto holístico existe también en agricultura y jardinería, una filosofía que anima por un lado a recordar la importancia del equilibrio de flora, fauna y nutrientes, pero también de la necesidad de conectar en todos los sentidos con el terreno que trabajamos. Si nos referimos a esa primera acepción, hablamos de una conexión medioambiental: si fumigamos con insecticidas dañinos, si añadimos nutrientes contaminantes, si no rotamos cultivos convenientemente... nuestro campo quedará yermo e inservible. Y lo que es peor, esa contaminación pasará a acuíferos subterráneos, llegará a los ríos y afectará a peces. Se quedará en los frutos que comemos y nos llevará a enfermar poco a poco o a desarrollar alergias. Y la falta de nutrientes del suelo se trasladará a los frutos, que tendrán carencias que impactarán en nuestra salud.

Desde el punto de vista espiritual, la conexión holística está más relacionada con el jardín y los cinco sentidos: podemos crear un entorno natural que alimente la vista, alegre los oídos, llegue al olfato, incluya el gusto y agrade al tacto. Es un espacio convertido en refugio de manera que nos sentiremos a gusto y en paz. Pero tendremos que dar algo a cambio para que ese jardín esté conectado, y será el respeto a la fauna microscópica, a los insectos (utilizando productos beneficiosos), a las aves...

¿Por qué tiene que estar conectado el jardín con un todo, qué ganamos con la jardinería holística? La fauna beneficiosa asegurará una ausencia de plagas, el terreno fértil dará más salud a las plantas, las aves piarán tranquilas, y nosotros seguiremos disfrutando con los cinco sentidos durante más tiempo.

Consejos:

El agua

Los árabes de la taifa zaragozana ya sabían de las delicias que traía el agua para el oído y la vista, y para refrescar en verano. Solo hay que ver el patio de la Aljafería y sus fuentes. Nosotros también podemos tener un pequeño estanque con bomba para oxigenar o una fuentecita de circuito cerrado. Las hay de todos los tamaños y precios y algunas sirven incluso para el balcón.

Aromas

No todo tiene que ser perfume de rosas, el aroma en el jardín o la terraza puede venir también de plantas sencillas como el romero, el tomillo, hierbabuena... Las petunias de color morado oscuro son olorosas, al igual que el jazmín y la madreselva. Plantas sencillas de cultivar y muy agradecidas.

Colorido

Si no tiene tiempo para cultivar muchas flores, puede añadir la nota de color con cojines, adornos para colgar en las paredes, luces multicolores a modo de guirnalda... Junto a un parterre verde será perfecto pintar de amarillo algún banco de madera.