El Fin del Mundo está al caer

Así es, muy próximo y encima de nuestras cabezas; es más, parece que "rodarán" muchas cabezas si el 12 de Octubre no nos ponemos a buen recaudo.

Nuestro enemigo sidéreo

Nuestro planeta, en su cósmico peregrinar, intercepta constantemente multitud de partículas, bien sean fragmentos de asteroides, cometas e incluso planetas, aunque la densa atmósfera de la Tierra y la alta velocidad del encuentro induce a que la mayoría se desintegren antes de llegar a la superficie terrestre.

De hecho estas partículas entran en la atmósfera a velocidades entre 11,2 y 72,8 km/s, dando lugar a preciosos fuegos artificiales naturales, las comúnmente llamadas estrellas fugaces.

En la actualidad existen alrededor del Sol, moviéndose entre los planetas, multitud de cuerpos más pequeños siguiendo órbitas inestables. Si estos cuerpos rocosos tienen un diámetro inferior a 10 metros se denominan meteoroides. Aquellos que superan ese diámetro se denominan asteroides, si su composición es rocosa, o bien cometas si están compuestos mayoritariamente por hielo de agua y otros volátiles.

Pero el 12 de Octubre, importante fecha señalada en el calendario, nos visita un "personaje" muy peculiar. El Asteroide 2012 TC4, una enorme roca de 40 metros de diámetro, dos veces mayor que el caído en Rusia en el 2013 y que produjo miles de heridos y cuantiosos daños materiales. No solo eso, pasará a tan solo 44.880 kilómetros de la Tierra, distancia 10 veces más corta que la que separa a nuestro planeta de la Luna. La hora de su mayor acercamiento será a las 2:42 (GMT) del 12 de Octubre. Lo aviso para que estemos atentos y, en el mejor de los casos, nos "agachemos" a su paso. Aunque es bien sabido que. para "rompimientos" de la vida en la Tierra, ya existen muchos "humanos" que se encargan en buscarlos.

¿Qué es lo peor que le puede pasar a un galo?...

Que nos caigan las estrellas en la cabeza, comentaban Asterix y Obelix en su andar por tierras bretonas en donde su ancestral culto funerario, plasmado a través de Dólmenes y Menhires, nos recuerda a esos “pedruscos” que pueden caer del cielo. Porque, de hecho, la historia de la Tierra está plagada de versiones de la caída de meteoros o bólidos de mayor envergadura y que han dejado profunda huella en la “piel terrestre”, más de 80 hay clasificados en todo el mundo cuyo impacto ha generado cráteres de varios kilómetros de diámetro.

De todos es sabida la teoría que asocia la desaparición de los Dinosaurios de la faz de la Tierra debido a la caída de estos inoportunos visitantes. Hoy, los científicos hacen un control y barrido constante de la trayectoria de esas inmensas piedras que vagan por el espacio. Dicen que las probabilidades de que alguna caiga en la Tierra son mínimas, pero el riesgo existe.

Visitantes "no gratos"

Meteorito caído en El Chaco (Norte de Argentina).

Las cosas del Espacio jamás dejarán de sorprendernos.

El impacto de un gran asteroide puede generar polvo que se distribuye por toda la atmósfera terrestre, cubre el cielo y bloquea la luz solar; se enfría la superficie del planeta durante unos meses y ello afecta a las plantas y a los animales produciendo extinciones en masa. 

Si mañana nos golpea algo tan grande como el cuerpo que chocó hace 65 millones de años, desde luego que se produciría una extinción masiva. Un cuerpo más pequeño, del tamaño de un edificio, destruiría todo Madrid.

Viviendo entre Meteoritos:

Zona delimitada por el impacto del Meteorito de Azuara (Aragón, España).

Ningún punto del planeta está exento del arribo de estos inoportunos visitantes. El cráter de Azuara, en Zaragoza, producido por un bólido hace 35 millones de años, da buena cuenta de ello.

El cráter tiene 30 kilómetros de diámetro, fue descubierto hace unos años por Kord Erntson. Calculamos que el cuerpo que lo produjo mediría unos dos kilómetros de diámetro. La onda de la explosión tendría un alcance de mil kilómetros a la redonda y destruiría todo; en ese radio la temperatura sería suficientemente alta, centenares de grados, como para quemar todo. Fue hace 35 millones de años. El centro de la estructura del cráter está a escasos 50 kilómetros al Sur de Zaragoza y a 15 de Belchite, y nosotros "tan panchos"...

Pues ya sabes amiga/o lector, el 12 de Octubre tenemos una cita de la que no nos podemos escapar. Observar el cielo, estad atentos, que como dice un querido amigo "Si ves un misil, corre hacia él"... Felices pesadillas.