Blog - Al Alba

por Mariano Gistaín

Otro mundo aún por inventar

Tras la espeluznante comparecencia del trío de incendiarios del gobierno -Sáenz, Guindos, Montoro- España ha quedado noqueada: atascada en la histórica fecha del viernes 26 de abril de 2013. La aparición del presidente el domingo en Granada confirmó el mensaje:


El gobierno ha tirado la toalla.


Y lo explica con toda transparencia en rueda de prensa.


Se ven impotentes. Se resignan.


España todavía no ha digerido esos mensajes. Es normal.


Sin embargo se abre una gran esperanza: a partir de ahora solo podemos mejorar.


Que un gobierno reconozca su incapacidad es un avance antropológico.


Hemos de asumirlo: estamos solos. Solísimos.


Podemos olvidarnos del último mito del XX: el poder de los gobiernos.


Ya se venía viendo, incluso era evidente. Pero nunca sirve de gusto renunciar a los mitos de la tribu, mitos alimentados por varias generaciones y por algunos hechos que ahora se desmontan.


En este sentido el gobierno español es un adelantado mundial: el resto de gobernantes siguen disimulando.


Por otro lado, Rajoy y sus acólitos han demostrado su responsabilidad siguiendo en sus cargos: lo lógico, tras reconocer su impotencia absoluta, hubiera sido dimitir. Pero eso hubiera desatado el caos, la prima de riesgo, etc.


A partir de esa rueda de prensa del trío de la gasolina tenemos que inventar otra cosa. Lo de innovar es una broma al lado de lo que nos exigen los tiempos.


Es difícil verlo, pero España va por delante en casi todo.


Es difícil y amargo, porque esta anticipación, ahora, es en lo malo.


Hay que ponerse a pensar. Lo que tenemos que inventar es todo. Y entre todos.


Cuando pase el puente, nos ponemos.