Blog - Al Alba

por Mariano Gistaín

Aragón: independencia

Tras el hachazo al presupuesto, solo queda la vía catalana.


Elecciones, referéndum y enviar la solicitud a Europa.


Hasta nos podemos ahorrar las elecciones.


Con la que está cayendo nadie se va a enterar, pero el mensaje hay que mandarlo el lunes a primera hora. Las Cortes en Pleno permanente (comidas gratis) y televisado e internet (que lo vean en el New York Times).


Emitir un Pleno Indefinido Aragonés ya es una novedad. Que debatan todo lo que ha pasado desde noviembre de 1591, hay tiempo.


Esta asamblea permanente, por un lado es legítima (quién mejor) y por otro reconcilia a la ciudadanía con sus representantes: fenómeno inédito mundial.


Verles trabajando día y noche, encerrados, va a ser un legitimador absoluto. Y a ver qué deciden, qué proponen. Hay que innovar. Siempre ajustadicos a derecho, pero sin reblar.


Alguien tiene que hacer algo bueno. Cataluña va demasiado a su bola, tiene una postura como un poco autista. Aragón puede emprender una vía original, cuestionar el modelo desde dentro, desde la legalidad, sin romper nada, pero sin ceder ante una catástrofe diaria. Al menos frenar el desbarajuste y la improvisación.


La mirada amplia, puesta en España y en Europa, una reflexión permanente desde un parlamento regional (enclaustrado al efecto indefinidamente) puede causar un efecto mundial. Hay que ser valientes y echar una mano al mundo, unas ideas.