¿Qué puedo hacer con las flores de mis lavandas y santolinas?

Aromáticas. Uno de los placeres de tener plantas aromáticas en el jardín es aprovechar sus flores o ramas para hacer sacos perfumados, que se pueden colocar en los armarios, en el coche o repartidos por toda la casa. Hay que aprovechar las flores cuando estén secas: cortarlas y colocarlas sobre unos periódicos un par de días para que suelten la humedad. Se desmenuzan con los dedos y se meten en los saquitos. Las bolsas han de ser porosas para que el contenido no se pudra: se recomiendan las de tela. Las ramas de lavanda y la santolina se pueden secar para hacer ramos: hay que cortarlas, colgarlas boca abajo y esperar unos días.