Blog - Tinta de Hemeroteca

por Mariano García

La 'locomotora de Garrapinillos' no fue a los Juegos de Berlín

goez-copia
goez-copia


El gurú de los sondeos en Aragón, Javier Miravete, se presenta un día en la Redacción y dice: 'Tienes que sacar en Tinta de Hemeroteca a Clemente Goez'. Y yo, que soy un baúl de ignorancias, no sé quién es Clemente Goez. Miravete empieza a sacar fotocopias de crónicas deportivas de los años 30 y lo que se perfila es un gran corredor, uno de esos pioneros del atletismo en España que, sin apoyos de ningún tipo, ganaban las principales carreras. Clemente apuntaba alto. Parecía que iba a ir a los Juegos Olímpicos de Berlín cuando... estalló la guerra civil y todo se fue al traste. No he podido encontrar una crónica jugosa de los triunfos de Clemente Goez, pero sí un texto magistral. En muchos sentidos. En febrero de 1993, ya con 85 años, lo entrevistó Juan Pedro Burgueño en el HERALDO. Disfruten: 


Narra un cronista deportivo de los años 30 que un aragonés, un desconocido llamado Clemente Goez, corrió la Vuelta a Madrid más rápido que un equipo de relevos de cinco atletas. Pero aquella guerra fratricida... ¿Iba para monstruo del atletismo?

-A lo mejor sí, pero ni había dinero ni los pobres podíamos hacer nada. Si me iba a correr, tenía que pagar a otro para que trabajara por mi.

-Maldita guerra civil.

-Nos partió en dos a todos. Se acabaron las fiestas de los pueblos, donde corríamos.

-¿Su éxito más querido?

-La Vuelta a Madrid en 1935 y segundo en Bilbao. A los mejores, nos llevarían al extranjero.

-¿La Olimpiada de Berlín'36?

-(Asiente con la cabeza y se iluminan sus ojos azules). No fuimos por la guerra, pero yo no pensaba en otra cosa.

-¿Y estaba usted preparado?

-Corrí 3 veces en dos meses.

-No entrenó mucho.

-Me encontraba muy bien, y mejor después de casarme, aunque parezca mentira. Iba a las carreras de los pueblos en bicicleta, desde Garrapinillos a Épila, y aún me daban las piernas para ganar.

-¿Medallas en Berlín?

-Solo pensaba en ir y ganar lo que pudiese. Tenía mucha ilusión. De los españoles, era el mejor. Estaba Ramos, el campeón, pero dijo que si alguien en España podía ganarle era yo.

-¿Su color en la guerra?

-Hombre, verde (se extraña).

-Quiero decir, ¿rojo, o azul?

-De los de Franco y porque me tocó así.

-¿Cómo entrenaban?

-En la guerra, nada. Me escapaba de noche a Casetas y me hacía unos kilómetros.

-¿La fama prodiga la altivez, como Carl Lewis?

-¿Quién es ese? Yo solo sé trabajar en el campo.

-Ahora el diseño de los trajes es igual al suyo de hace 60 años.

-Cuiroso. De rodilla a hombros. Mi primera camiseta fue de los Exploradores y en las carreras nacionales nos la dejaban y luego la devolvíamos.

-Las atletas españolas ya pueden enseñar el ombligo.

-Cosas de los nuevos tiempos. Está bien.

-¿El doping de los años 30?

-Nada de sustancias. Garbanzos y judías.

-¿Con Franco se vivía mejor?

-Hombre, porque éramos jóvenes (con picardía). Pero ahora no estamos mal.

-A sus 85 años, ¿qué le ha enseñado la vida?

-A estar contento por llegar.

-¿Quisieron pagarle para que perdiera?

-Pero si no me pagaban ni por ganar... Una vez, la única, me dieron 240 pesetas en Tamarite.

-¿Lo mejor es participar?

-Lo mejor es ganar.

-Cuénteme una anécdota.

-Ya no estoy para recordar.

-¿Qué le hace saltar de la silla y pensar 'si yo pudiera...'?

-Lo mismo me da gobierno arriba que abajo.

-¿Y si le apodo 'la locomotora de Garrapinillos'?

-Bueno (poco convencido). Debo ser el único de Garrapinillos sin mote.

-¿Conocía a un tal Troncoso?

-(Recuerda). Era delegado de atletismo y militar. Cuando gané la Vuelta a Madrid me dijo: 'Yo recojo la copa y no se te perderá. Y no se me perdió, porque nunca llegué a verla.

-¿Piensa en lo que pudo ser?

-Podría haber adelantado más. Pero correr sin entrenar...

-¿Su peor coscorrón?

-Trabajar, sin pensamientos.

-¿Qué les dice a las futuras generaciones?

-Que vivan como puedan.

-¿Y las pensiones?

-Estoy contento. Antes nadie recibía un duro.

-Será el único de España.

-(Se hace el 'longui'). Y eso que cobra la más baja (descubre su nieta).

-Dice Aznar que con el PP, el cambio. ¿Le suena la cantinela?

-(Frunce el ceño). Al que tú llamas 'el del bigote', abuelo (le ayuda su nieta). Después se verá (añade él despreocupado).

-¿En el cielo hacen carreras?

-Como no lo he visto...

-¿Lo pasó bien conmigo?

-Hombre, ¿por qué no?


Y el sábado...

Entrevista con Arrudi, el 'Gigante de Sallent'

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión