Aragón vivió ayer un día de calor anormal en esta época del año. A apenas dos semanas de que comience oficialmente el invierno, gran parte de la Comunidad vio cómo los termómetros superaban durante el día los 17 o 18 grados. En Zaragoza incluso se llegó a los 22, lo que significa que la capital aragonesa batió su temperatura máxima absoluta en el mes de diciembre.

Según las efemérides climatológicas que maneja la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), hasta ahora ese récord correspondía a los 21,8 grados que se midieron en el aeropuerto de Zaragoza el 13 de diciembre de 1981. Sin embargo, ayer el mercurio subió dos décimas más estableciendo una nueva marca.

En Sariñena los termómetros se quedaron en 18,4 grados; en el aeropuerto de Huesca, en 17,9; y en otros muchos observatorios superaron los 17: Calatayud, Daroca, Sos del Rey Católico...

En el Pirineo los valores diurnos no fueron tan altos, pero en ningún caso bajaron de los 10 grados. Además, las mínimas alcanzadas de madrugada tampoco cayeron por debajo de los 4,6 grados positivos registrados en Benasque.

Descenso "moderado o notable"

Este episodio de calor inusual durará poco, ya que la Aemet prevé que hoy mismo las temperaturas experimenten en Aragón un descenso que en general será moderado (de dos a seis grados) pero que puede ser aún mayor en el tercio norte de la Comunidad. De esta forma, las heladas débiles volverán al Pirineo.

Mañana viernes las mínimas se mantendrán en moderado descenso y las máximas se mantendrán sin cambios o en ligera caída. De cara al fin de semana, las temperaturas diurnas oscilarán entre los 10 y los 15 grados en toda la Comunidad.