Hace gestos obscenos a una niña en un bar de Zaragoza y se encara con los policías que le detienen

El detenido mostró una actitud agresiva y trató de hacerse con la defensa extensible de uno de los agentes, a los que insultó y amenazó.

Imagen de archivo de un coche de la Policía Nacional
Imagen de archivo de un coche de la Policía Nacional
POLICÍA NACIONAL

Primero amedrentó a una mujer y su hija menor de edad y cuando ésta pidió ayuda a una pareja de agentes de la Policía Nacional, Juan Carlos L. Z., que acabó detenido por un delito de resistencia y desobediencia, no dudó en encararse con ellos e incluso amenazarles. No es la primera vez, en su expediente constan otras tres detenciones, dos por violencia de genero y una por lesiones y daños.

Ocurrió a última hora de la tarde del viernes pasado en la calle de Terminillo en el barrio de las Delicias de Zaragoza. La denunciante se encontraba en la terraza de un bar junto a sus hijos cuando observó que dos hombres estaban realizando desde el interior del establecimiento gestos obscenos a su hija. Le sacaban la lengua y le hacían señas con la mano de connotación sexual.

Ante esto, la mujer se dirigió a los dos hombres solicitándoles que parasen porque ella y su hija se estaban sintiendo vejadas. Lejos de deponer su actitud, le golpearon en un brazo mostrando agresividad. Ella optó por volver a la calle y al percatarse de que había cercana presencia policial se dirigió a los agentes para relatarles lo ocurrido.

Acto seguido, los policías entraron al bar y solicitaron a esos dos hombres que se identificasen. Juan Carlos L. Z. no solo se negó, sino que agarró a uno de los agentes del cinturón tratando de apoderarse de la defensa extensible. Al ser rechazado por el funcionario, se levantó de la silla y se le encaró dándole un empujón.

Para evitar que fuera a mayores, los policías lo inmovilizaron y detuvieron. Aunque la actitud de su acompañante también fue desafiante, éste obedeció cuando se le indicó que se marchase del establecimiento. Durante el traslado a Comisaría, Juan Carlos L. Z., cuya defensa han asumido los abogados Carmen Sánchez y Luis Ángel Marcén, profirió varios insultos y amenazas. Posteriormente, ya en las dependencias policiales se le localizó en un bolsillo una bolsa que contenía lo que se sospecha que era marihuana.

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