zaragoza

Los vecinos del parque Bruil se quejan de la falta de civismo junto a la escuela infantil

La asociación de madres y padres estudia movilizaciones para protestar por la suciedad con la que suele amanecer el entorno. 

La nueva plaza ubicada junto al aparcamiento del parque Bruil.
La nueva plaza ubicada junto al aparcamiento del parque Bruil.
José Miguel Marco

Columpios, balancines y un montón de espacio de juego casi por estrenar. La nueva plaza con área infantil ubicada sobre el aparcamiento subterráneo del parque Bruil de Zaragoza, que abrió por fin el pasado julio después de diez años de idas y venidas y tras mucha reivindicación vecinal, no está recibiendo uso. Y eso que se ubica justo frente a una escuela infantil municipal, por lo que no sería raro que numerosos niños utilizaran cada día el equipamiento. Sin embargo, aseguran los vecinos que es la falta de civismo de otras personas lo que está impidiendo disfrutar de las instalaciones. 

La zona se encuentra en buen estado y el servicio de limpieza del Ayuntamiento de Zaragoza pasa por allí con regularidad, según aseguran los vecinos. Sin embargo, los comportamientos incívicos son tan recurrentes que la asociación de madres y padres del centro se reunirá próximamente para estudiar la posibilidad de llevar a cabo movilizaciones para pedir la intervención del gobierno municipal y tratar de ponerles fin. 

Desde el Colectivo Vecinal Parque Bruil (de reciente creación) aseguran que la escuela infantil es una de las infraestructuras públicas que mejor acogida tiene y que está muy bien valorada por las familias usuarias. Sin embargo, lamentan que "es víctima de la dejadez imperante". Según dicen, varias personas suelen pernoctar en las inmediaciones, al encontrarse cerca del albergue municipal, y dejan los alrededores "llenos de basura". Igual que los usuarios del centro educativo, aseguran que se encuentran bolsas, latas, multitud de colillas, heces y "pañuelos que usan para limpiarse después de hacer sus necesidades". 

"El servicio de limpieza pasa de vez en cuando, pero al final es un simple parche", rematan desde la entidad, que añaden que se trata de "una queja constante desde hace años". También las familias de la escuela infantil critican que en numerosas ocasiones se han encontrado excrementos de persona en la puerta del centro cuando acudían a primera hora a dejar a sus hijos, y que incluso alguna vez han tenido que retirar varios colchones que taponaban el acceso al mismo. 

Un equipamiento nuevo y esperado

El estacionamiento subterráneo del parque Bruil llevaba cerrado desde 2012, justo cuando abrió la escuela. Fue construido un año antes gracias a la financiación del Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL) del Gobierno de España. Sin embargo, el desplome del sector inmobiliario bloqueó la adjudicación y tuvieron que pasar casi diez años hasta que se logró que una empresa se hiciera con su gestión. De hecho, el precio de salida a concurso fue descendiendo con el paso de los años y con los intentos infructuosos de darle salida. 

Finalmente, tanto el parquin como la urbanización del exterior fueron a parar por 1,1 millones de euros a la empresa mercantil Plaza 14, que lo puso en funcionamiento el pasado julio. El aparcamiento era muy demandado por los vecinos, que denunciaban las escasez de plazas en la zona, lo que obligaba a muchos trabajadores a dejar el coche en casa ante la imposibilidad de encontrar un lugar donde dejarlo. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión