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Tremendo atasco en pleno centro de Zaragoza tras una agresión a una conductora de Uber
La Policía Local de Zaragoza detiene a un conductor de 28 años tras amenazar y soltar un bofetón a la mujer y encararse después tanto con viandantes como con los agentes.
Una violenta discusión de tráfico acabó este miércoles con un conductor detenido y un tremendo atasco en pleno centro de Zaragoza. El suceso se produjo en torno a las 13.00 en el paseo de Pamplona, donde un joven de 28 años identificado como J. A. D. L. se bajó de su coche y se fue directo hacia un vehículo de alquiler con conductor de la empresa Uber. Como se aprecia en las imágenes que grabaron algunos ciudadanos y que se difundieron después a través de las redes sociales, esta persona empezó a abrir y cerrar con fuerza las puertas del turismo mientras increpaba a la mujer que iba al volante, a la que empezó dando empujones y terminó lanzando un tremendo bofetón.
El suceso se produjo a la altura del Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, uno de los puntos más transitados de la capital aragonesa. De hecho, fueron varias las personas que decidieron mediar para evitar que el hombre siguiera agrediendo a la conductora. Lejos de deponer su actitud, este se encaró también con ellos, braceando y repartiendo más empujones. En un momento dado, el individuo se dirigió también a un autobús urbano que estaba parado y empezó a dar puñetazos al lateral. Posiblemente, recriminando a un pasajero que estuviera grabando la escena con su teléfono móvil.
La desproporcionada y agresiva reacción de J. A. D. L. hizo que algunas personas llamaron al 092, que enseguida movilizó numerosas patrullas. Cuando los agentes pidieron explicaciones al joven que había agredido a la conductora de Uber, este no dio ninguna. Es más, se encaró y amenazó también a los policías, que se vieron obligados a detenerlo. Según fuentes oficiales, ni siquiera en ese momento depuso su actitud, por lo que fueron necesarios dos funcionarios para ponerle los grilletes y trasladarlo a comisaría.
A estas alturas, se desconoce cuál fue el motivo por el que este joven se comportó de un modo tan violento. No hay constancia de que se produjera ninguna colisión previa entre el vehículo del arrestado y el de la empresa Uber, que llevaba a una clienta cuando se produjo la agresión. La Policía Local practicó una prueba de etilometría al detenido, pero este arrojó un resultado negativo.
El gran atasco que se formó en los carriles del paseo de Pamplona que discurren en sentido paseo de Sagasta fue mayúsculo, hasta el punto de que fue necesario recurrir a numerosos agentes para conseguir dar agilidad al tráfico.
