Lo que en principio debería haber sido el día más feliz para una pareja de novios, ha acabado en una sonora bronca durante el convite y posterior baile que festejaba su enlace matrimonial. Y es que el calor del momento, o quién sabe qué circunstancia, ha acabado con varios invitados implicados en una riña con los camareros de un conocido hotel del centro de Zaragoza, cuando estos se disponían a dar por terminada la celebración.

El altercado comenzó en torno a las 11.00 de la noche de este sábado en el Gran Hotel, cuando los empleados del establecimiento llamaron a la Policía porque algunos invitados se estaban empezando a mostrar "excesivamente nerviosos" a la hora del cierre, lo que habría desencadenado un cruce de palabras. Los efectivos de la Policía Nacional y de la Local no tardaron en llegar al lugar para poner orden entre los participantes en la algarada.

Incluso uno de los camareros de un local cercano, que en ese momento estaba recogiendo las mesas de la terraza al ser ya la hora del cierre, aseguró que les había sorprendido la llegada de los efectivos policiales y se había creado cierta expectación en los alrededores del establecimiento hotelero.

Fuentes de la Policía Nacional han informado a este diario de que, en un primer momento, ninguno de los implicados en la misma había resultado herido ni había sido detenido, y en torno a la medianoche la paz reinaba en el exterior del hotel.

Según consta en el parte de la Policía, el aviso se recibió a las 11.00 de este sábado, cuando el personal del hotel alertó a los agentes de que una boda "se les estaba yendo de las manos", y tuvieron que desplazarse al lugar varias patrullas para actuar de forma preventiva y evitar que la riña fuera a más.

Hasta el lugar acudieron Policía Nacional y Policía Local, y fueron estos últimos quienes se hicieron cargo de la situación. No obstante, los agentes subrayan que no hubo ni detenidos ni denuncias.