zaragoza
Atacan a dos amigos con un machete en una vivienda de Conde Aranda
Una de las víctimas pudo escapar y pedir ayuda, pero el otro joven quedó retenido en el piso hasta que fue rescatado por la Policía Nacional.
No es habitual que alguien se presente en casa de unos conocidos y lo reciban machete en mano. Pero eso es lo que literalmente les ocurrió a un par de amigos, a los que acabó rescatando una patrulla de la Policía Nacional tras ser víctimas de un robo con violencia en la vivienda a la que habían acudido de visita. Los hechos se produjeron el pasado 7 de enero en un domicilio de la calle Conde Aranda de Zaragoza, pero fue ayer cuando se celebró el juicio contra los agresores.
Según relataron las víctimas, nada más cruzar la puerta del piso, uno de los investigados, Hamza H., sacó un machete y les exigió todas sus pertenencias. «Dadnos todo u os matamos», les gritó. Casi no les dio tiempo a reaccionar, ya que los inquilinos de la vivienda –el segundo fue identificado como Reda E. K.– se les echaron encima y a base de golpes consiguieron arrebatarles los teléfonos móviles, un reloj, una cartera y hasta las llaves del coche.
En plena refriega, uno de los agredidos logró alcanzar la puerta de la vivienda y darse a la fuga. Peor suerte corrió su amigo, al que los dos acusados retuvieron y encerraron en una habitación. Afortunadamente, el joven huido alertó de lo que estaba sucediendo a la Policía Nacional, que acudió presta al domicilio y consiguió rescatarlo.
En prisión desde el 7 de enero
Al ver entrar a los agentes, Reda E. K. se dirigió corriendo a la cocina para arrojar por el balcón varios de los bienes sustraídos a las víctimas. Sin embargo, los funcionarios se percataron de lo que hacía y recuperaron después en la calle el botín. También localizaron el machete con el que atacaron e intimidaron a la pareja de amigos, que tuvo que pasar por urgencias pero no sufrió lesiones de arma blanca.
Dada la violencia con la que se emplearon los investigados, el juez de guardia decidió enviarlos en su día a prisión provisional, donde han permanecido desde entonces. La Fiscalía los acusaba de un robo con violencia, un delito de coacciones y otros dos de lesiones. Pedía para cada uno de los agresores seis años de prisión, pero al reconocerse ambos autores de los hechos, llegaron ayer a un acuerdo para fijar su castigo en dos años de cárcel. También tendrán que indemnizar con 824 euros a los denunciantes.
