La Guardia Civil trata de identificar a los autores del crimen de un hombre de 45 años al que un ciclista halló muerto de un disparo a primera hora del pasado sábado, 2 de octubre, en las proximidades del casco urbano de Pleitas, una pequeña localidad de la comarca de la Ribera Alta del Ebro de solo 34 habitantes. La víctima, de 45 años, era bastante conocida entre los vecinos del pueblo porque se dedicaba a vigilar una pequeña plantación legal de cáñamo industrial en una finca situada detrás del edificio del Ayuntamiento. De hecho, todo apunta a que su muerte podría estar relacionada con el intento de robo que se produjo el viernes por la tarde en las instalaciones.

La Comandancia de Zaragoza se limitó a confirmar el homicidio sin facilitar ningún otro dato, ni siquiera la identidad del fallecido, ya que la juez ha declarado secretas las pesquisas del caso. Según explicaron a HERALDO algunas personas que la conocían, la víctima residía actualmente en Mallén, aunque parece que procedía de la Comunidad Valenciana. No trabajaba para ninguna empresa de seguridad, pero conocía al dueño de la plantación y este le pagaba por vigilarla. Sobre todo, ahora que había recogido la cosecha y el cáñamo se estaba secando.

La Guardia Civil mantiene abiertas varias vías de investigación y cree que en los hechos podría estar implicado un grupo importante de personas. Así se lo habrían transmitido algunos de los vecinos de Pleitas que sorprendieron a la banda el viernes durante su primera incursión en la plantación, obligándoles a abortar sus planes y huir del lugar de forma precipitada. Eran entre las 20.00 y las 20.30 y los testigos llegaron a contabilizar a hasta ocho individuos.

Toni Galán

El dueño de la finca fue alertado de lo ocurrido y acudió allí de inmediato. También lo hizo una patrulla de la Benemérita, que pudo comprobar que los ladrones tenían preparados varios fardos de plantas secas para llevárselas. En la parte trasera de las instalaciones había aparcadas también dos furgonetas que les resultaron sospechosas, pero que no pudieron registrar entonces.

La víctima llamó a medianoche

El propietario del cáñamo y los guardias permanecieron en Pleitas hasta las 23.00, hora en la que al parecer llegó el vigilante para tomarles el relevo.En cualquier caso, el dueño, que vive en Zaragoza, le dijo que se iba a asear a casa y regresaría más tarde. Según fuentes próximas al caso, hora y media después, cuando ya estaba de camino a Pleitas, el joven recibió una llamada del ahora fallecido diciéndole que una de las dos furgonetas sospechosas aparcadas fuera había entrado en la plantación. El hombre creía que los ladrones habían vuelto, por lo que volvieron a llamar a la Guardia Civil.

El dueño del cultivo de cáñamo no tardó en llegar, pero, para entonces allí ya no estaban ni la furgoneta ni el vigilante, con el que parece que intentó comunicar sin éxito. La patrulla del 061 se presentó también en el almacén y volvió a inspeccionar los alrededores, pero tampoco vio nada extraño. Finalmente, los agentes se marcharon y el propietario se quedó a pasar la noche en el recinto.

Abandonaron una furgoneta

Los acontecimientos sufrieron un brusco giro a la mañana siguiente, cuando un ciclista que venía de La Muela se topó con un todoterreno accidentado en el camino que une Bárboles con Pleitas. Y aún más cuando al extraer el cuerpo de la víctima del interior se comprobó que era el vigilante y que había recibido un disparo.

Los especialistas del Laboratorio de Criminalística estuvieron analizando el escenario del crimen durante varias horas. El vehículo fue extraído de la acequia por los Bomberos de la Diputación de Zaragoza y trasladado después a las instalaciones de Benemérita para continuar con las periciales. La Guardia Civil intervino y se llevó también la furgoneta que la tarde anterior habían visto aparcada en la parte trasera de la plantación de cáñamo y que al día siguiente vieron que había sido movida y abandonada en un maizal. Creen que pertenece a los ladrones y podría aportar pistas para su localización.

El fallecido fue hallado muerto en una acequia lejos de las finca

Son todavía muchas las incógnitas que planean sobre el crimen de Pleitas y a las que ahora trata de dar respuesta la Guardia Civil. Una de ellas, si como parece se produjo un encontronazo a medianoche en la plantación de cáñamo entre los ladrones y el vigilante, ¿qué hacía este tan lejos de la finca? Porque el ciclista que se topó con su todoterreno en una acequia lo hizo a las afueras del pueblo, a entre 200 y 300 metros del recinto.

El vehículo fue extraído del riego por los Bomberos de la Diputación de Zaragoza, por lo que se desconoce el estado en el que se encontraba. Los especialistas de la Benemérita estuvieron toda la mañana y gran parte de la tarde documentándolo todo, ya que habrán de averiguar si el disparo que supuestamente acabó con la vida del vigilante –a falta de lo que pueda decir la autopsia– se produjo dentro o desde fuera del coche. Los expertos en balística intentarán determinar también el arma y munición empleados –todo apunta a una pistola–, así como la trayectoria del proyectil. Y si esta confirmara que el autor del disparo acompañaba al fallecido, se abrirían nuevas líneas de investigación. Por el momento, la Guardia Civil trabaja con este material de cara a esclarecer una muerte que ha alterado la tranquila vida de un pueblo como Pleitas.