Carmen María O. S. admitió ayer en la Audiencia de Zaragoza los cargos que el Ministerio Público presentó contra ella después de que fuese detenida en la Estación Delicias con 24 gramos de anfetamina pura y 28,5 gramos de resina de cannabis.

La mujer, de origen portugués, sufre de bipolaridad y, en el momento de la detención, también de adicción a las drogas. Estas dos circunstancias le habrían causado «un menoscabo de su capacidad volitiva» y de «la comprensión de los hechos», según esgrime su abogada, Mirta Manrique. Y en ellas se apoyará como atenuantes para solicitar que se suspenda la pena «siempre que se certifique que la condenada se encuentra deshabituada al consumo de sustancias tóxicas o que se ha sometido a tratamiento para tal fin».

Carmen María fue detenida cuando viajaba desde San Sebastián, donde tiene su residencia habitual, hacia, presuntamente, la localidad de Valencia. En el momento del arresto alegó que acudía a la ciudad mediterránea de cara a la temporada de recogida de la naranja y que las sustancias que le encontraron tanto a ella como a su entonces novio ­–ya condenado– eran para consumo propio.

La encausada aceptó finalmente el acuerdo con la Fiscalía al que llegó su letrada, por el que tendría que pasar tres años en prisión y abonar una multa de 3.200 euros. Sin embargo, confía en que el tribunal acepte suspender la ejecución de la pena.