El Ayuntamiento de Biota ha iniciado las obras necesarias para que la residencia de ancianos de la localidad pueda abrir por fin sus puertas esta primavera. Se trata de trabajos menores, como la construcción de un almacén, la reubicación de la lavandería, la instalación de una escalera de emergencia en la segunda planta o la rectificación de la pendiente del suelo de los baños. "La residencia se terminó de construir hace ocho años, por lo que hay detalles que se deben adaptar a una normativa que ha ido cambiando, como nos habían señalado en las visitas de la inspección de centros.

“Las obras van a suponer una inversión cercana a los 70.000 euros más el dinero para amueblar su interior, por lo que la cantidad será de 450.000 euros", explicó el alcalde, Ezequiel Moreno, que adelantó que se va a sacar un pliego de condiciones para que las empresas presenten ofertas. El Consistorio ha decidido que asumirá la gestión directa del centro después de que las conversaciones mantenidas durante los últimos cuatro años para la adjudicación a diferentes empresas no hayan llegado a formalizarse. "Pensamos que la gran inversión que había que hacer asustaba a las empresas. Ahora las obras las realiza el Ayuntamiento directamente. Creemos que podremos contar con ayuda de las instituciones y también hicimos en marzo una modificación presupuestaria de 300.000 euros para cubrir los primeros gastos", detalló el edil.

Contarán con la tutela inicial de la Fundación Elvira Otal, que gestiona la residencia municipal de Ejea de los Caballeros, y el apoyo de la Fundación Rey Ardid, con la que han suscrito un contrato menor de asesoramiento para el funcionamiento del primer año de la residencia y la apertura en gestiones como la selección de la plantilla o las compras.

Acuerdo de colaboración

"Pensamos que en pocos meses se completarán las 38 plazas del centro. A través del acuerdo de colaboración con Elvira Otal, que tiene muchas lista de espera, se propondrá que los usuarios puedan venir a Biota hasta que dispongan de plaza en Ejea. No buscamos la rentabilidad, pretendemos ofrecer un servicio de calidad y cubrir la necesidad que existe, y para eso el Ayuntamiento está decidido con total acuerdo entre los grupos. Es una residencia que ha costado 2,2 millones de fondos públicos y hay que ponerla en marcha", dijo Marco.

La creación de empleo es otro de los aspectos que destacó el alcalde. Considera que los veinticinco empleos que generará la residencia "son una Opel para Biota y van a dar mucha vida. Ahora mismo y después de mucho trabajo y con la ayuda de DGA y DPZ, ya podemos ver la luz al final del túnel". El edificio cuenta con dos plantas con 20 habitaciones de dos plazas cada una de ellas y un centro de día de 70. El complejo integra también el consultorio médico y el servicio de enfermería, que están funcionando desde 2013.