"Ni un paso atrás en igualdad", "Contra la violencia machista, lucha feminista", "Nunca jamás nos van a amordazar", "Nuestros derechos no se negocian" y "El aquelarre ha despertado de nuevo". Fueron algunos de los eslóganes que pudieron escucharse y leerse ayer en las concentraciones feministas que se celebraron en algunas de las principales localidades de Aragón, que se sumaron a la convocatoria nacional para mostrar la solidaridad con las "hermanas andaluzas" que van a tener un Gobierno apoyado por el partido de "extrema derecha" de Vox y protestar contra sus propuestas de derogar leyes y normativas que protegen los derechos de las mujeres.

En Zaragoza, cerca de medio millar de personas, la mayoría mujeres pero también se pudo ver a bastantes hombres, abarrotaron la plaza de España de la mano de la coordinadora de organizaciones feministas.

El objetivo de la movilización, según se explicó en el comunicado que leyó la portavoz de esta organización, era mostrar la "enérgica protesta" al "pacto" andaluz con una fuerza política "netamente de la ultraderecha" y lamentar que por primera vez en 40 años una fuerza con un discurso "fuera de los valores constitucionales" haya entrado en una institución.

La coordinadora insistió en que no van a dar "ni un paso atrás" en los derechos de las mujeres, como a su juicio pretende Vox, una formación que aseguró llega dispuesta a imponer "el totalitarismo, el racismo y la misoginia".

Las organizadoras de la concentración alertaron de que lo mismo que ha ocurrido en Andalucía puede suceder en otras comunidades y ciudades españolas, algo que, aseguraron, no están dispuestas "a consentir de ninguna de las maneras". Además, acusaron a Vox de hacer un "uso perverso del lenguaje" al equiparar el feminismo al nazismo y de "minimizar de forma intolerable" el casi millar de vidas que la violencia machista se ha cobrado en España desde 2003. Por todo ello, hicieron un llamamiento a que en las próximas elecciones las mujeres ejerzan su "responsabilidad democrática" y "dejen claro" en las urnas que sus derechos "son intocables y no hay pacto posible".

En Huesca, cerca de 300 personas se concentraron a la misma hora (19.00) en la plaza Concepción Arenal y otras 200 lo hicieron en la del Torico de Teruel. En la capital altoaragonesa se leyeron manifiestos advirtiendo de que no cederán "ante la amenaza del fascismo, del racismo, de la homofobia y del machismo". Las protestas se repitieron en otras localidades como Tarazona, Fraga, Jaca, Aínsa, Sariñena o Benasque.