Un supuesto aborto ilegal destapado por la Guardia Civil lleva a juicio a una joven

Los agentes descubrieron el caso en 2016 cuando investigaban el hallazgo de un feto en el vertedero de La Cartuja.

Ciudad de la Justicia de Zaragoza.
El juicio estaba previsto que se celebrara ayer, pero la magistrada decidió suspenderlo.
Oliver Duch

Una joven se sentó este jueves en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 5 de Zaragoza acusada de un delito de aborto. La Fiscalía solicita para ella una multa de 5.760 euros, la máxima prevista en el artículo 145.2 del Código Penal para los casos en que una mujer se provoca a sí misma la interrupción del embarazo o consiente que otro lo haga.

Según explica la abogada de la mujer, el ministerio público sostiene que el aborto se practicó después de la semana 22, uno de los supuestos prohibidos por la legislación actual en España. La tesis de la Fiscalía se basa en los análisis que se realizaron a la placenta en el hospital, porque tras la interrupción de la gestación la mujer tuvo que ser atendida por hemorragias. Los médicos determinaron ya entonces que la joven había abortado.

La abogada defensora, por el contrario, solicita la libre absolución (o alternativamente, la multa mínima prevista para este delito) porque la acusada mantiene que estaba embarazada de 12 semanas cuando ingirió unas pastillas que provocaron la pérdida del feto. Por lo tanto, abortó dentro de los plazos legales. Esta parte considera que el grado de madurez de la placenta no es una prueba de cargo para determinar la interrupción del embarazo sobre el plazo máximo, ya que hay mujeres que presentan envejecimientos acelerados de este órgano.

La defensa mantiene que la mujer se vio abocada a abortar en la clandestinidad porque en el momento de los hechos residía de forma irregular en España y no tenía derecho a asistencia sanitaria porque el Gobierno de Mariano Rajoy la suprimió en 2012.

El juicio contra esta mujer estaba previsto que se celebrara este jueves, pero aunque la acusada y los testigos acudieron a la Ciudad de la Justicia, la magistrada decidió suspender la vista. El motivo alegado fue que al hombre que suministró las pastillas para provocar el aborto se le abrió en su momento una causa separada. Este jueves, la titular del Juzgado de lo Penal número 5 estimó que sería más conveniente sumar las dos piezas y por eso retrasó la vista para enjuiciar a los dos a la vez.

Restos hallados en La Cartuja

La investigación que ha llevado a esta mujer hasta el banquillo comenzó hace más de dos años. El 12 de julio de 2016, un operario del ecovertedero de La Cartuja (Zaragoza) halló el cráneo de un feto y la Guardia Civil se hizo cargo de las pesquisas. Los investigadores tuvieron noticia de que una vecina de Zaragoza había abortado fuera del circuito sanitario, por lo que cotejaron el ADN de la placenta con los restos del vertedero.

Los resultados dieron negativo, pero como los médicos estimaban que el grado de madurez de la placenta se correspondía con un aborto ilegal, la Guardia Civil investigó a la mujer, un trabajo policial que culminó con su acusación.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión