“Si llegara la fibra a Belchite se podrían crear más puestos de trabajo"

Se suponía que la fibra iba a llegar a Belchite el pasado mes de marzo, pero a fecha del 18 de julio, con el verano ya a mitad, los vecinos de este municipio zaragozano siguen sin poder disfrutar de este servicio.

"En teoría tendría que estar ya en Belchite. Siempre se producen retrasos, pero estamos ya en este mes y no ha llegado. Nos han dejado con la incertidumbre, y hemos pedido una reunión con el consejero a ver qué es lo que pasa con el plan Conecta Aragón", afirma Carmelo Pérez, el alcalde de la localidad.

Con el verano ya iniciado, Belchite y el resto de pueblos de la Comarca del Campo de Belchite afrontan una dificultad añadida en este sentido. "Al haber más afluencia de gente en estos meses, hay también más clientes y se saturan antes las líneas", explica Pérez.

Los cortes, según cuentan los vecinos, se producen en todas las compañías y ocasionan no pocos perjuicios a buena parte de ellos. "A veces se hace imposible... Hay mil personas que trabajan desde casa y a determinadas horas de la tarde-noche, cuando llega todo el mundo a los hogares y nos conectamos, es imposible trabajar. Si tanto estamos con el tema de la despoblación, ¿por qué no se arregla esto? Las empresas son precisamente las que necesitan una buena conectividad", subraya Carmelo, quien se muestra convencido por las conversaciones que mantiene con otros empresarios y directivos de la zona de que la llegada de la fibra permitiría crear más puestos de trabajo en Belchite y otros pueblos de la comarca.

"Hay una empresa que se está instalando ahora aquí, que es Grovisa, que podría ampliar mucho más la plantilla para dar trabajo a gente de la zona si la conexión a internet fuera la normal", asegura.

De la misma opinión es Alberto Serrano, un belchitano que trabaja desde casa para una empresa informática y que se vio obligado a cambiar de operador ante las continuas incidencias que soportaba a diario. "Ahora que todo el mundo tiene smart TV, había horas que no podía ni trabajar. Yo estoy conectado todo el día. Trabajo desde casa, y la velocidad que tenía era penosa... Acabé harto de poner reclamaciones y que no me solucionaran el tema", señala.

Esta realidad es común a muchos vecinos de la zona que, según indican, tienen contratado un ADSL de 10 megas, pero pocas veces llegan a disfrutar de esta cantidad. "Cuando va bien te llegan 5 o 6 como mucho, y si va muy mal menos de 1", lamentan. La situación se complica aún más en verano, cuando más gente viene a los pueblos. "A mí la compañía me llegó a decir que cuando hubiese menos gente me iría mejor. Pero, ¿qué hago entonces? -les dije-. ¿Me compro una escopeta y empiezo a liquidar vecinos?", relata con sorna.

Según datos facilitados por el comparador 'Qué ADSL contratar', salvo contadas excepciones en municipios cercanos a la capital aragonesa, el 89,5% de los núcleos de menos de 5.000 habitantes en Aragón no cuentan por ahora con una cobertura de fibra superior al 10%.

"Hay un plan del gobierno central que, en transposición de directivas europeas, pretende garantizar el acceso a conexiones de un mínimo de 30Mb en todas las zonas de España. Esto se está haciendo ya actualmente a través de ayudas del gobierno para que los usuarios en zonas con malas coberturas puedan contratar internet por satélite. Además, las compañías continúan con su despliegue de fibra llegando progresivamente a más hogares", informa Ángel Bouzas, responsable del portal.

Aun así, la localización geográfica de determinados municipios, el número de habitantes o la propia orografía sigue jugando en contra de muchos núcleos rurales de Aragón.

La principal diferencia para el usuario entre fibra óptica y ADSL es la velocidad de la conexión. Las conexiones de fibra son más veloces y más estables, mientras que las velocidades de las conexiones de ADSL no están garantizadas, ya que por la propia tecnología pierden velocidad cuanto más lejos está el punto de conexión de la central, además de por otros factores. "Si la conexión ADSL es escasa, la experiencia del usuario con su conexión puede ser muy inestable. El reto de las compañías en la actualidad está en seguir trabajando en el despliegue de redes de fibra óptica de forma progresiva para llegar cada vez a más zonas de España", recalca Bouzas.