Pilar Urgel: "Estaba tendiendo cuando todo se ha ido abajo"

Pilar Urgel estaba ayer por la mañana tendiendo la colada cuando vio que la casa que tiene enfrente, a unos 25 metros, la del alcalde, se vino abajo. Esta vecina de Nuévalos se asustó mucho por el tremendo ruido y por la humareda que provocó el derrumbe, pero sobre todo porque sabía que en ese momento había albañiles trabajando en la vivienda.

"Lo primero que he pensado ha sido, ¡Dios mío!, se ha venido abajo y hay gente dentro", contaba Pilar. Enseguida vio que Paco, "el que conduce el camión de la basura", paró a ayudar y avisó. "Una veintena de vecinos jóvenes han venido corriendo para quitar escombros –añadió Pilar­–. Cuando han llegado los equipos de emergencias se han organizado y ya no han necesitado tantas manos".

Tanto el presidente de la DPZ, Juan Antonio Sánchez Quero, como el de la comarca Comunidad de Calatayud, Ramón Duce, se acercaron hasta Nuévalos nada más que se enteraron de lo sucedido.

"Ha sido una desgracia tremenda y podía haberse convertido en una tragedia, pero por fortuna parece que los heridos saldrán adelante", dijo Sánchez Quero, que mandó todo su ánimo a los familiares de las víctimas y al alcalde, al tiempo que felicitó a los bomberos y al resto de servicios de emergencia por su trabajo. "La verdad es que ha sido un susto muy grande. Lo primero que piensas es que han podido morir. Menos mal que enseguida nos han dicho que en todo momento estaban conscientes y estaban hablando con ellos", dijo Duce.